La reunión mantenida este jueves, a instancias del Gobierno vasco, entre el comité de huelga de Metro Bilbao y la dirección se ha cerrado "sin ningún tipo de acuerdo" respecto a la huelga convocada para el día de Santo Tomás en el suburbano. En el encuentro, la empresa ha solicitado unos servicios mínimos para la jornada del 90 por ciento y del 100 por cien en momentos puntuales del día. El comité, por contra, ha exigido que funcionen un 30 por ciento de las unidades.

Durante una rueda de prensa celebrada en Bilbao, posterior a la reunión, el comité de huelga ha analizado la actual situación después de que en el encuentro no se hayan acercado posturas.

El comité ha indicado que la empresa ha reiterado su petición de recurrir a un arbitraje para abordar únicamente el problema de la cobertura de plantilla, mientras que los representantes de los trabajadores han reiterado su oferta de conciliación y la petición de que se busque una solución global y se aborde no sólo el tema de la cobertura de plantillas, sino también otras cuestiones como la reestructuración del área de mantenimiento, el servicio de trenes en nochebuena y para el año 2012 y la cobertura de reducciones de jornada.

En la reunión, la empresa ha solicitado para la huelga del día 21, festividad de Santo Tomás, unos servicios mínimos del 90 por ciento y del 100 por cien al mediodía y durante el partido del Athletic de Bilbao, que también se celebra ese día.

Por su parte, el comité, que ha destacado que siempre ha cumplido los servicios mínimos aunque los haya considerado "excesivos", y que lo seguirá haciendo, ha solicitado un 30 por ciento, ya que, a su juicio, con este porcentaje se garantiza el "servicio esencial".

Valencia ha indicado que, en principio, no hay prevista ninguna reunión más entre ambas partes y que el día 20 de diciembre han llamado a los trabajadores a tomar parte, "ahora más que nunca", en las asambleas convocadas para ese día, donde se tomarán "las decisiones pertinentes acerca de la huelga del día 21 y de futuras movilizaciones".

En este sentido, ha apuntado que, si después de la huelga del día 21, no hay solución a este conflicto, se seguirán convocando movilizaciones. El comité ha indicado que su objetivo es buscar soluciones porque es "humillante" llegar a acuerdos y que, luego, la empresa "los incumpla". LÓPEZ

Por otra parte, el comité ha denunciado y mostrado su malestar por las declaraciones realizadas por el lehendakari, Patxi López, en torno al conflicto del Metro, así como por otros representantes institucionales.

Según ha manifestado, estas intervenciones, en vez de colaborar en la búsqueda de una solución, "de una manera negociada y dialogada, sólo sirven para "distanciar posiciones, justificar las actitudes de la patronal y poner a la sociedad en contra de los trabajadores de Metro Bilbao.

El comité ha indicado que un cargo institucional como el lehendakari, antes de realizar unas declaraciones "tan desafortunadas e impropias", debería conocer las causas del conflicto "más en profundidad" y haber escuchado "la voz de los trabajadores o de sus representantes". "Nuestra puerta siempre ha estado abierta, pero nadie ha tocado en ella", ha agregado.

Según ha manifestado, de sus declaraciones se desprende que su objetivo último no es "solucionar los problemas", sino posicionarse de parte de "la patronal".

El comité, que también ha criticado "las mentiras" sobre las condiciones de los trabajadores, ha añadido que todo este tipo de declaraciones que se están produciendo y las "previsibles decisiones" del Gobierno vasco, lo único que consiguen es "eludir responsabilidades para intentar solucionar el problema y alargar el conflicto en el tiempo".

En este sentido, le han recordado al lehendakari que el derecho a la huelga es un "derecho fundamental de los trabajadores" en la defensa de sus derechos laborales y que debería "protegerlo".

Discursos populistas

El comité ha pedido a la clase política que se "olvide" de discursos "demagogos y populistas". "Quienes acusan a la parte sindical de politizar el conflicto, se desenmascaran desde el momento que partidos políticos y cargos institucionales toman parte en el conflicto apoyando a una de las partes", ha añadido.

Asimismo, ha denunciado que se les pretende "echar a la opinión pública encima" cuando sólo buscan que "se cumpla lo pactado y el respeto de los derechos laborales y sindicales".

En todo caso, el comité ha reiterado que siguen dispuestos a hablar con la dirección y han vuelto a ofrecer "la mano tendida" para establecer cauces de conciliación que puedan abrir la senda de la negociación entre ambas partes".

"Creemos que todas las partes debemos hacer un esfuerzo por restablecer las relaciones laborales y el seguimiento y cumplimiento de que en ellas se acuerde. Nosotros estamos en disposición de hacerlo, pero nuestra paciencia no es infinita", ha añadido.

Asimismo, ha rechazado que se busquen "soluciones parciales, parches de última hora o cortinas de humo" que permitan a una de las partes "presentarse de una manera triunfal" porque "no harán sino alargar el conflicto con unas consecuencias no deseadas para nadie".

Por último, ha reiterado que el origen del conflicto es la "falta de respeto" a los acuerdos negociados de los actuales gestores de Metro Bilbao, que pretenden "destruir empleo", con la eliminación de plazas de carácter estructural.