El Gobierno regional ha continuado en la tarde de este miércoles con la Mesa General de Negociación del Empleado Público, después de CCOO y UGT abandonaran por dos veces este foro de negociación, y tras el encuentro mantenido con CSI.F y FSES, han decidido convocar una nueva reunión de la Mesa de General de Negociación para este viernes, "con el fin de establecer nuevos cauces de diálogo".

En nota de prensa el Ejecutivo regional ha indicado que a la reunión de la mañana, convocada con el objetivo de tratar el borrador de Ley de Medidas Complementarias del Plan de Garantía de los Servicios Sociales Básicos, han asistido los sindicatos CSIF, FSES, CCOO, UGT y no se ha alcanzado un acuerdo "ya que tres de los cuatro sindicatos han abandonado la mesa".

"En su empeño por apostar por el diálogo con los agentes sociales de la Castilla-La Mancha, el Gobierno regional ha vuelto a reunir en la tarde de hoy la mesa en la que se han sentado de nuevo estos cuatro sindicatos", ha defendido.

El resultado es que los sindicatos CSIF y FSES, que cuentan con la mitad de los votos de los empleados públicos de la Junta de Comunidades, han decidido continuar debatiendo con la representación del Gobierno para impulsar el consenso y el diálogo con el Ejecutivo.

Por su parte, CCOO y UGT han vuelto a abandonar la Mesa de Negociación "escenificando así su negativa a dialogar con el Gobierno regional las medidas incluidas en el Plan de Garantía de los Servicios Sociales", han condenado desde el Ejecutivo.

El Ejecutivo regional, como muestra de su disposición al entendimiento con los principales agentes sociales de la región, ha convocado de nuevo a los sindicatos a la celebración de una nueva reunión de la Mesa de General de Negociación el próximo viernes con el fin de establecer nuevos cauces de diálogo.

El Gobierno regional "apela a la responsabilidad de los sindicatos a la hora de afrontar la delicada situación económica por la que atraviesa la región".

Asimismo, lamenta "la negativa de los sindicatos UGT y CCOO a establecer un proceso de diálogo con el Ejecutivo regional", ya que estas centrales sindicales "optaron por el silencio y el inmovilismo durante los años de Gobierno socialista que han provocado la severa crisis económica que padecemos".

Por último, el Gobierno de Castilla-La Mancha agradece y reconoce el "esfuerzo" que van a realizar los empleados públicos a partir del próximo 2012 y recuerda que la decisión de reducir un 10% del complemento específico el sueldo de los empleados públicos "es temporal y extraordinaria y que se debe a la necesidad de acometer medidas que estimulen la generación de empleo y garanticen el mantenimiento de los servicios sociales básicos en nuestra región".