La organización internacional para la conservación marina Oceana ha transmitido de nuevo al Govern su disposición a "unir fuerzas para impedir exploraciones petrolíferas" en el Canal de Ibiza, dado que a su juicio 4.000 kilómetros cuadrados de fondos marinos "corren riesgo de ser devorados" por dichas prospecciones.

En un comunicado, Oceana recuerda que las prospecciones para hallar hidrocarburos en aguas entre Baleares y Comunidad Valenciana fueron autorizadas por el Gobierno central en diciembre de 2010 y han sido adjudicadas a las empresa británica Cairn Energy, entidad que "produce anualmente más de 33.000 barriles de petróleo al día en el mundo".

"Cairn Energy pretende convertir el Mediterráneo en una nueva zona de explotación masiva de hidrocarburos con sus ojos puestos en España, Líbano, Siria y Chipre, entre otros países", expone la organización para la conservación del medio marino.

Por otro lado, Oceana apoya la decisión de la Comisión balear de Medio Ambiente, que se ha sumado al rechazo que estas prospecciones han despertado entre diferentes políticos, empresarios y organizaciones conservacionistas.

Estas entidades, según Oceana, han expresado "su oposición a continuar con la destrucción del fondo marino para perpetuar una extracción mineral que debe reducirse con el fin de eliminar sus múltiples impactos sobre el medio ambiente, la sociedad y la economía mundial", tal y como recoge la declaración aprobada en Baleares.

Además, Oceana incide en que ya hizo llegar su rechazo a las prospecciones en el Canal de Ibiza tanto al expresidente del Govern Francesc Antich como al ministro de Industria, Turismo y Comercio en funciones, Miguel Sebastián.