Hace 26 años que milita en el APRA (Alianza Popular Revolucionaria Americana), histórico partido de la izquierda. Llegó en 1993 a Barcelona, donde reside con su familia y donde dirige la campaña de la célula del APRA en la capital catalana.Su objetivo inmediato es que Alan García se proclame vencedor en la segunda vuelta de las presidenciales peruanas, que se celebrará el 4 de junio.«Nuestro objetivo es que no gane el otro candidato, Ollanta Umala, un militar retirado», asegura esta trabajadora social en proceso de homologación de su título. «De momento, trabajo en la limpieza y cuidando a una persona», explica. La célula barcelonesa del APRA (www.aprabcn.com) no tiene medios económicos. Funciona del voluntarismo. Los pocos anuncios que consiguen los costean particulares. «Nuestro presupuesto es cero euros», bromea. Hasta ahora, las reuniones se hacían en casas particulares, hasta que la agrupación del PSC de Ciutat Vella les ha cedido parte de sus locales. Uno de los actos importantes ha sido la exposición del plan de gobierno del APRA en la Casa América.