La ocupación de un inmueble en San Sebastián, conocido como Uxotegi, se ha convertido en una piedra en el zapato del Gobierno local de Bildu, después de que esta semana el pleno haya decidido crear una comisión para investigar el caso, que también sigue un juzgado de instrucción donostiarra.

La ocupación del edificio, que lleva años deshabitado y es propiedad de una mujer de 104 años residente en Madrid, se produjo el pasado 24 de septiembre, un día después de que el colectivo juvenil Kukutza fuera desalojado de otro inmueble situado en el barrio de Rekalde de Bilbao, donde se produjeron violentos incidentes.

Esta circunstancia hizo temer que un caso similar pudiera reproducirse en San Sebastián, si bien la policía no llegó a intervenir en el edifico de la Parte Vieja donostiarra y desde entonces un grupo de okupas permanece en la casa, que han rebautizado como Uxotegi (Palomar) y donde, según el abogado de la propietaria, han causado diferentes destrozos.

A pesar de la ausencia de altercados, el asunto ha suscitado una encendida polémica municipal después de que, tras pedir infructuosamente el desalojo de los okupas, el letrado de la propietaria desvelara la existencia de un informe de la Guardia Urbana que identifica a Josetxo Ibazeta, secretario del alcalde, Juan Karlos Izagirre, como "responsable" del movimiento de ocupación.

Este documento revelaría que Ibazeta se presentó "como secretario del alcalde" con "una tarjeta de visita del Ayuntamiento" ante los guardias municipales que se disponían a intervenir y que los agentes abandonaron el lugar sin actuar "tras recibir órdenes de la oficial de servicio".

A raíz de esta revelación, los diferentes grupos municipales pidieron explicaciones al Gobierno de Bildu que alegó que Ibazeta no actuaba como responsable del movimiento de ocupación "sino como interlocutor" entre los guardias y los okupas, una de las cuales es su propia hija.

En este contexto, otro elemento contribuyó a elevar el tono de la polémica cuando, el 2 de noviembre, tres integrantes del movimiento 15-M ocuparon por unas horas el antiguo teatro Bellas Artes de San Sebastián.

Estos jóvenes aseguraron que la Guardia Municipal les desalojó del inmueble del que salieron después de que los agentes les aclararan que "tenían dos formas de salir: por las malas o por las buenas", mientras que, según la versión de la Policía Local, los jóvenes habrían abandonado voluntariamente el edificio.

La última vuelta de tuerca al asunto la dio el pasado lunes el PNV, al denunciar que el consistorio había reconocido a los okupas de Uxotegi como organizadores de una serie de actividades del Día Internacional del Euskera.

La comisión municipal de investigación, impulsada por los partidos de la oposición PP, PNV y PSE/EE con la abstención de Bildu, deberá indagar ahora sobre todos estos asuntos en las sesiones que celebrará cada quince días durante tres meses a partir del momento de su constitución.

Paralelamente, el Juzgado de Instrucción número 5 de San Sebastián, que ya ha tomado declaración a varios okupas imputados, así como al propio Ibazeta, cuya hija, menor de edad, también fue citada en esta misma sede judicial, continuará adelante con la investigación penal.