La Audiencia Provincial ha condenado a penas que suman nueve años y medio de prisión a dos hombres y una mujer que traficaban con heroína.

Los dos hombres, D.H.L. y M.A.S.S., naturales de Sofía (Bulgaría) y Cartes (Cantabria), respectivamente, se dedicaron en el verano de 2010 a la adquisición y venta de heroína. Según explica la sentencia de la Sección Primera de la Audiencia Provincial, para ello, ambos realizaban viajes a Madrid, donde se proveían de la mercancía, y, posteriormente, la distribuían en papelinas y entregaban a terceras personas, entre ellas a la mujer condenada, L.M.P.M.

La mujer, a la que le ha sido impuesta una pena de un año y medio de cárcel y una multa de 200 euros, los dos hombres le entregaban cada dos días una media de 50 papelinas —16 para ella y el resto para la venta—.

Precisamente, ésta fue sorprendida el pasado 19 de agosto de 2010 con doce papelinas de heroína ocultas en una cartera de mano en el interior del bolso y otras tres en el sujetador, con un peso global de 0,84 gramos, además de un pequeño trozo de hachís de 1,08 gramos.

Además, llevaba un frasco de metadona con restos, 305 euros procedentes de las ventas de droga que realizaba y dos teléfonos móviles. Posteriormente, en el registro de su piso en Astillero, se intervinieron 14 comprimidos de anfetamina y varios frascos de metadona.

En total, la droga intervenida a la L.M.P.M —que entregaba a D.H.L y a M.A.S.S. el dinero que obtenía de las ventas de las papelinas— tenía un valor en el mercado ilícito de unos 390 euros.

Según explica la sentencia de la Audiencia, la mujer ha reconocido el delito y ha aportado datos sobre el modo y la forma en que se realizaba el tráfico de heroína que han resultado "relevantes" para que se obtuvieran pruebas contra los otros dos acusados.

Unos días después de incautarle la droga a la mujer, se registró los domicilios de estos dos hombres —en Campuzano el de M.A.S.S. y en Santander el de D.H.L— en los que se incautó varios gramos de heroína, dinero procedente de su venta y documentación relativa al tráfico de estas sustancias tóxicas.

En su sentencia, la Audiencia ha impuesto la mayor pena de cárcel a D.H.L., al que ha condenado a cuatro años y medio de prisión —6 meses menos de lo que solicitaba el Ministerio Fiscal— y a una multa de 600 euros por su papel en la distribución de la droga y, atendiendo, a la frecuencia con que se dedicaba a esta actividad y por la atenuante de reincidencia al contar ya con varias condenas.

En su domicilio, se intervino en una funda de cojín un envoltorio con 1,53 gramos de heroína, quince papelinas de la misma sustancia con peso de 1,05 gramos, además de un frasco de metadona. La droga intervenida a D.H.L, que pidió su absolución, estaba valorada en 252 euros en el mercado ilícito.

Por otra parte, en la interior del depósito del aspirador se encontraron recortes de plástico. También, se intervinieron 190 euros procedentes del tráfico de drogas, documentación referente al tráfico de heroína, tarjetas de crédito, libretas de ahorro, un teléfono móvil, un ordenador portátil y unas llaves del vehículo que un día antes había sido intervenido a M.A.S.S, todos productos adquiridos con dinero procedente del tráfico de sustancias tóxicas.

Por su parte, a M.A.S.S., además del coche, en el que se encontró una navaja, se le intervinieron dos bolsas con 11,69 y 44,91 gramos de heroína, respectivamente, valoradas en más de 3.300 euros; 20 euros procedentes del tráfico de drogas, una libreta de ahorro, diversas anotaciones manuscritas con nombres, teléfonos y cantidades relativas al tráfico de drogas, un teléfono móvil, una cinta ametralladora con 69 cartuchos —cuatro de ellos sin carga— y una balanza digital.

A este hombre, condenado como a los otros dos acusados por un delito contra la salud pública, se le ha impuesto una pena de tres años y seis meses de prisión y a una multa de 3.400 euros.

De los tres condenados, D.H.L. está actualmente en prisión por esta causa desde agosto de 2010; mes en el que también ingresaron M.A.S.S. y L.M.P.M en la cárcel, donde permanecieron hasta abril y enero, respectivamente. A los tres se les ha reconocido la atenuante de drogadicción.