CCOO ha advertido de que el modelo productivo de Málaga "ha fracasado" y si no se cambia, no podrá salir de la crisis. Así se desprende de un informe elaborado por el sindicato, que concluye que los contratos en la provincia son "de baja cualificación, alta temporalidad y gran precariedad laboral", al tiempo que alerta de que el mayor descenso en la contratación afecta sobre todo a los menores de 25 años.

De hecho, en este análisis de la contratación desde que empezó la crisis económica, centrándose especialmente en 2010 y 2011, se establece que hay una caída de los contratos indefinidos y a jornada completa y un aumento de los temporales y a tiempo parcial.

Así ha informado este lunes en rueda de prensa el secretario provincial de CCOO, Antonio Herrera, quien ha dicho que "Málaga ya no es capital económica de Andalucía" y ha criticado que los empresarios apuesten por el actual modelo productivo, pese a que ya ha dado pruebas de su "estancamiento". Por ello, ha apostado por la I+D+i y por potenciar el tejido industrial, que "es el que más contratación indefinida y valor añadido aporta".

Según el estudio del sindicato, hay una excesiva temporalidad, con una duración media muy corta de los contratos, que, además, se concentran en ocupaciones de baja cualificación; un crecimiento continuo de los de tiempo parcial, sobre todo en mujeres y jóvenes, y una discriminación femenina, ya que la precariedad laboral se da especialmente entre las mujeres.

Todo ello demuestra, según el dirigente sindical, "el gran fracaso" de las reformas laborales, que "no crean empleo, pero sí condicionan el que se cree cuando se reactive la demanda", así como que éste sea "más precario, aunque no se esté en crisis". Asimismo, ha rechazado medidas como el contrato único, ya que "sólo persigue abaratar la contratación y precarizarla".

Por su parte, el responsable del Gabinete Técnico de CCOO de Málaga, Antonio Turmo, ha incidido en la bajada experimentada por el número de contratos en la provincia de Málaga, pasando de los 720.000 de 2006 a los más de 520.000 de 2010.

Turmo ha comentado que mientras que en 2010 hubo respecto a 2009 un aumento del 1,7 por ciento en los contratos, en los 10 primeros meses de 2011 se registró un descenso del 0,2 por ciento, siendo esa caída especialmente significativa en la contratación indefinida —de un 8,9 por ciento—.

Frente a esto, la contratación temporal ha experimentado un aumento este año, aunque sólo haya sido de un 0,4 por ciento; la gran mayoría de esos contratos son de duración determinada, que ha subido un 0,3 por ciento. Por tipo de jornada, ha disminuido un 4,8 por ciento la completa y se ha visto incrementada un 9,9 por ciento la parcial.

La contratación a tiempo parcial representa en 2011 un 36 por ciento, habiendo ido aumentando año tras año —en 2003 era sólo un 20,3 por ciento—. Además, la duración media de esos contratos es de apenas 48,5 días, según Turmo.

Por sexo, el estudio determina un descenso en los 10 primeros meses de 2011 tanto en varones como en mujeres, con un 0,1 y un 0,3 por ciento, respectivamente. En cuanto a la modalidad de contratación, tanto en varones como en féminas, la que desciende siempre es la indefinida. En lo que se refiere a la jornada parcial, las protagonistas son casi siempre las mujeres.

El estudio alerta, como ya se comentó, de que sigue decreciendo la contratación de jóvenes, que son los más afectados por la crisis, con un descenso de enero a octubre de 2011 de un 7,6 por ciento en el caso de los menores de 25 años, una bajada que en 2010 se situó en el 1,8 por ciento.

Este hecho se nota, especialmente, en la evolución de los últimos años, pasando del 29 por ciento que representaba la contratación juvenil en 2003 al 18,9 por ciento del ejercicio actual. Además, suelen ser contratos de obra o servicio o eventuales. SECTORES

Por sectores, los contratos en servicios representaron de enero a octubre de 2011 un 71,1 por ciento del total, frente al 12,7 por ciento de la agricultura, el 11,4 de la construcción y sólo el 4,1 por ciento de la industria.

Asimismo, dentro de servicios, por actividades empresariales, la hostelería, las administrativas y de servicios auxiliares y el comercio representan el 60,4 por ciento. "Que estas tres actividades sean las que sostienen gran parte de la contratación en la provincia no es para tirar cohetes", ha considerado Turmo.

Sigue bajando la contratación en la construcción, con un descenso en 2011 del 7,8 por ciento. En servicios, que aglutina más del 80 por ciento de los contratos, ha habido, por el momento, un incremento del 3,3 por ciento. Aunque la industria también ha experimentado este año un aumento, del 6,3 por ciento, han advertido de que "es un sector que cuenta poco en la provincia; es insignificante".

Las ocupaciones elementales —aquellas sin cualificación: peones, mozos y limpiadoras— concentraron, junto con servicios, la mayor contratación de enero a octubre de este año, con un 32,8 y un 30,3 por ciento, respectivamente, unos datos que, según Turmo, "tampoco son para tirar cohetes".

Ha resaltado que hay una gran concentración en la contratación, como se demuestra que en 2010 hubiera 526.532 contratos de 336 ocupaciones y que, sin embargo, el 57,7 por ciento se refiriera sólo a 10 —nueve de las cuales eran sin cualificación—: peones agrícolas, personal de limpieza, camareros, vendedores en tiendas, albañiles, trabajadores cualificados en actividades agrícolas, cocineros, peones del transporte de mercancías y descargadores y también de la construcción y administrativos sin tareas de atención al público.

Rotación y formación

También se hace hincapié en este informe en la rotación y en el aumento cada vez mayor de esta práctica, ya que el total de contratos no corresponde a gente diferente, sino que "hay muchas personas a las que se les hace más de un contrato en el año". En este punto, Turmo ha mencionado el dato de que a 1.824 individuos se le hicieron más de 15 contratos durante todo 2010, destacando sobre todo mujeres.

Otro aspecto en el que incide el estudio es el nivel formativo, ya que la mayor parte de los contratos llevados a cabo en 2010 eran a personas con estudios de Secundaria, muy lejos de aquellas que tenían formación universitaria.

Respecto a la movilidad, Málaga tradicionalmente ha sido una de las provincias andaluzas más receptoras de trabajadores debido sobre todo a la construcción; sin embargo, estos empleados han descendido, e, incluso, en sectores como servicios o industria es ya más emisora de mano de obra.

Por último, Turmo se ha referido a la contratación de extranjeros, que también ha sufrido los efectos de la crisis económica, representando de enero a octubre del presente año un 13,2 por ciento del total.