Tras una trayectoria más de 20 años sobre los escenarios, Carles Alberola y Alfred Picó se baten en un auténtico duelo teatral que reflexiona con humor agridulce, ironía y ternura sobre la vida, el paso del tiempo y la profesión con un "sincero" 'Que tinguem sort!'. Un espectáculo escrito y dirigido por el propio Alberola y nacido de las "entrañas", que defiende la capacidad de la dramaturgia "para hacernos mejores personas, para darnos coraje, para tirar adelante y modificar nuestra existencia".

Así han presentado sus protagonistas esta coproducción de Albena Teatre y Teatres de la Generalitat que estará en el Teatro Talía del 30 de noviembre al 18 de diciembre en su versión en valenciano, después de año y medio de gira desde que se estrenara en mayo de 2010.

'Que tinguem sort!' cuenta la historia de dos actores cómicos que conversan en los camerinos antes de empezar una función. En el escenario encuentran una felicidad que la vida cotidiana les niega. Después de veinte años de trabajo, solo la ficción les puede proporcionar lo que ellos esperan, pero para que sea posible necesitan "un poco de suerte".

De este modo, habla sobre "nuestra sociedad, de lo que somos, de lo que hemos dejado de ser", reflexiones que "encontraron su camino" a raíz de la muerte del diseñador gráfico Enric Solbes, un "compañero de teatro" de Alberola que "estuvo en la génesis de la compañía" y que fue "una pata fuerte" de su trayectoria. Toda la obra está vinculada a este hecho. "A veces, hasta que no perdemos a alguien no nos damos cuenta de lo que realmente representa", ha confesado.

En este sentido, "el teatro, la narrativa y el cine son un elemento válido para hacernos mejores personas, para revelarnos el mundo, para describirnos otras realidades o leerlas correctamente", ha defendido, y a través de los personajes de esta obra, se "habla de una generación, de la defunción del teatro y al mismo tiempo de la reivindicación del teatro y de la ficción como un instrumento básico para nuestras vidas".

'Que tiguem sort!' supone el regreso a los escenarios del más puro estilo de Albena, después de cinco años de incursión en el mundo del audiovisual trabajando en series y comedias de situación. Es el montaje número 17 de la compañía, y aunque 'Art' es el número 18, éste todavía no había podido traerse a Valencia por cuestiones de agenda.

Para Alberola, este espectáculo "el mejor" que ha hecho hasta ahora, no tendría sentido sin su tantas veces compañero de reparto Alfred Picó ('Besos', 'Spot', 'Art'...), alguien con quien ha asegurado entenderse bien y "compartir un universo".

"profesión adulta" en "tiempos difíciles"

Por su parte, para Picó ha confesado sentirse "muy identificado" con un montaje y ha considerado "un verdadero regalo" poder interpretar algo en lo que cree. Así, ha apelado a seguir haciendo trabajos como este "con esfuerzo" a pesar del "mercado real", que en el caso del teatro son "básicamente los ayuntamientos", están "igual o tan mal" como el resto de instituciones en esta crisis económica, por lo que "su capacidad de compra es mínima".

A lo largo del año y medio que llevan de gira han podido comprobar que "las circunstancias han cambiado mucho" ha advertido Picó y además "a peor" ha completado Alberola, quien ha constatado un "empobrecimiento estético" en el teatro y ha augurado que se será "difícil poner en pie los proyectos y más todavía, poder venderlos. Va a ser más complicado el mundo de la exhibición que el mundo de la producción", puntualizado.

En este sentido, ha señalado que "el problema será que el mercado, en los años que vienen, en dos o tres años, difícilmente podrá absorber la cantidad de producciones que se puedan hacer".

Pero "a pesar del desierto que todos avistamos en el horizonte también está la capacidad y la voluntad del teatro que tiene esa fuerza de transmitir sentimientos, intenciones y deseos", ha matizado.

En su opinión, la Comunitat Valenciana tiene "una profesión adulta", que "afortunadamente" ha tenido un "apoyo institucional claro" y se puede hablar de "un nivel de profesión que no tiene nada que envidiar a espectáculos en Madrid, Barcelona o País Vasco". "La lástima sería que eso se perdiera en el tiempo porque vamos a tiempos muy complicados", ha alertado.

De hecho, ya se puede constatar "en general una bajada de espectadores en el circuito teatral, porque el ocio teatral también la gente se lo mira un poco" pero ha abogado por "continuar" haciendo teatro, "hace falta seguir intentándolo y seguir sumando, llevamos toda la vida intentando sumar y así nos moriremos", ha concluido.