Madrid pide a Castilla-La Mancha y Castilla y León que paguen parte del abono transporte

Un grupo de viajeros en el metro.
Un grupo de viajeros en el metro.
JORGE PARÍS
Un grupo de viajeros en el metro.

La Comunidad de Madrid pedirá a las regiones de Castilla-La Mancha y Castilla y León que paguen parte del precio real de los abonos transportes que utilizan mensualmente los 9.000 usuarios de estas comunidades y cuyo coste asciende a un total de 3 millones de euros.

Así lo ha anunciado este martes el consejero de Transportes e Infraestructuras, Antonio Beteta, después de que el Gobierno de Esperanza Aguirre haya decidido dejar de subvencionar este título a quienes no residan en la región como medida de ahorro. "Lo que pretendemos hacer es que si quieren beneficiar a sus ciudadanos con esos descuentos, que firmen y paguen los correspondientes convenios", ha señalado Beteta.

Como informó 20minutos.es, los convenios firmados entre Madrid y las comunidades limítrofes, que vencen a finales de año, contemplan que ambas regiones subvencionen el precio de los abonos transportes al 50% con la Comunidad de Madrid. La modificación incluida en el proyecto de la ley de acompañamiento de los presupuestos regionales, contempla que solo se beneficien del precio reducido del abono transportes aquellas personas que demuestren residir en Madrid.

Esta condición podrá ser justificada de distintas maneras y no exclusivamente a través del empadronamiento, han indicado fuentes de transportes, que han especificado que esta modificación entrará en vigor una vez se desarrolle el reglamento correspondiente.

Las tarifas

Respecto a una posible subida de las tarifas de transportes, Beteta ha reiterado que este incremento estará vinculado a una eventual subida del precio combustible, el cual es "imposible de prever".

"El metro no es gratis, lo pagamos todos con nuestros impuestos y los usuarios con su aportación, que en estos momentos no llega al 40 por ciento del coste total del billete", ha reseñado el consejero.

La Comunidad vigilará que el coste del transporte, cuyo presupuesto se ha incrementado este año más de un 3%, se "mantenga en estos límites" y, por encima de este incremento, se complemente con la "aportación directa" de los ciudadanos, es decir, el pago de los billetes. Los sindicatos presentes en el Consorcio Regional de Transportes, órgano que fija los precios, ya alertaron de un posible nuevo 'tarifazo' a partir del 1 de enero de 2012.

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