El alcalde de Barcelona, Joan Clos, se mostró hoy partidario de aplicar penas más duras para los autores de actos vandálicos después de lo sucedido el pasado miércoles durante las celebraciones del título de Liga de Campeones conseguidos por el Barça.

"Cuando se condena por un delito de este tipo, las penas acaban siendo irrelevantes ante la envergadura del hecho producido", dijo el alcalde.

Joan Clos defendió la necesidad de "revisar estas normas", en alusión a la legislación, porque son "insuficientes".

Detenciones preventivas

El alcalde matizó unas declaraciones realizadas ayer en la cadena Localia Televisión donde apuntó que se deberían hacer detenciones preventivas para los alborotadores.

"No estoy diciendo que se aplique aquí", sino que "se ha hecho en otros lugares".

En este sentido puso el ejemplo de Nueva York donde sí que se realizan estas detenciones aunque "no de manera aleatoria y siempre con una base jurídica".

Joan Clos insistió que "no iremos por este camino".

La concejal Assumpta Serna dijo que "existe un abismo entre lo que el Ayuntamiento puede reclamar por vía administrativa", en el caso de actos vandálicos, y "el daño que estas personas pueden llegar a provocar".

El pasado viernes el alcalde de Barcelona ya señaló la idea de cerrar el acceso a la Rambla de Canaletes cuando el Barça gane un título y trasladar las celebraciones multitudinarias a otros lugares de la ciudad como el Tibidabo, Montjuïc y el Fòrum.

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