La Diputación de Gipuzkoa ha reiterado su disposición a negociar la armonización fiscal con el resto de instituciones forales pero ha advertido de que no va a aceptar "el derecho a veto de nadie". De este modo, ha asegurado que la armonización "es algo interesante" pero "una política progresista y de izquierdas en materia fiscal es imprescindible y vamos a ir a ello".

La portavoz foral, Larraitz Ugarte, en rueda de prensa, no ha descartado la posibilidad de lograr acuerdos con Álava y Bizkaia en la reunión que mantendrán el próximo jueves. "La posición del Gobierno foral de Gipuzkoa será la de intentar llegar a acuerdos e intentar armonizar la política fiscal de los tres territorios históricos, pero lo que no vamos a aceptar es el derecho a veto de nadie", ha remarcado.

Ugarte ha recordado que la Diputación guipuzcoana hace ya más de un mes que planteó sus propuestas fiscales y ha criticado que "hasta ahora lo único que se ha hecho ha sido dilatar el proceso, hacer prórrogas". "No vamos a seguir teniendo más paciencia", ha resaltado.

A su juicio, el Órgano de Coordinación Tributaria (OCT), en caso de que no haya armonización, "tendrá que informar al respecto de nuestras propuestas de norma foral y tendrán que seguir su tramitación". De este modo, ha afirmado que "lo que no puede ser, es que dos instituciones puedan tener derecho a veto y que el OCT no pueda cumplir con su función".

"Ojalá haya armonización, ojalá lleguemos a acuerdos, pero como siempre hemos defendido nuestros principios van por delante", ha asegurado la portavoz foral, quien ha confiado en que "se imponga el sentido común" porque "la armonización es buena para todos".

En su opinión, la armonización y la defensa de las propuestas fiscales de Gipuzkoa son "perfectamente compatibles". Por ello, ha considerado que el cambio en sus posturas "no lo tiene por qué dar" la institución foral guipuzcoana.

"La armonización es algo interesante. Una política progresista y de izquierdas en materia fiscal es imprescindible y vamos a ir a ello. Este es un tímido paso en esa dirección y estamos dispuestos a negociar, siempre y cuando nuestros principios rectores no decaigan", ha concluido.