Así lo ha asegurado la autora, que acaba de publicar 'El contenido del silencio' (Planeta), una historia que combina una trama de sectas y nazis para crear un "thriller romántico psicológico" con estructura de novela negra.

La obra cuenta la historia de Gabriel y Cordelia, dos hermanos huérfanos, distanciados desde hace una décadas por un trauma del pasado. Poco antes de su boda, Gabriel recibe una llamada inquietante que le informa de que su hermana ha desaparecido en Canarias en extrañas circunstancias. El protagonista, que lleva una vida apacible y ordenada en Londres, decide viajar hasta las islas para descubrir qué le ocurrió a su familiar.

Con este punto de partida, Etxebarría traza una narración "hiperdocumentada" basada en historias reales que indaga en los riesgos de ser manipulado, ha explicado la novelista en una entrevista concedida a Europa Press con motivo de la presentación del libro en Valencia.

Sectas, fenómenos políticos, psicólogos humanistas y movimientos zen pueden convertirse en trampas de aquellas personas que buscan respuestas, opina Etxebarría.

El carisma "malo" de berlusconi

En este sentido, señala que le interesan "muchísimo" temas como la manipulación que de los nazis, de Stalin o, más actualmente, del exprimer ministro italiano Silvia Berlusconi. "Es un ejemplo de cómo el carisma de un señor también puede ser muy malo, enredar completamente a los demás para lograr sus fines y llevar a un pueblo entero a la catástrofe", ha aseverado.

La autora confiesa que ha dedicado años a esta novela por lo que ha sido "un trabajo de investigación y emocional muy intenso". Se da la circunstancia de que el proyecto empezó como un guión cinematográfico que nunca llegó a llevarse a cabo "porque el productor se marchó con el dinero". Pero a esas alturas, la escritora ya estaba "fascinada" con la historia por lo que decidió convertirla en una narración. "No me hubiera metido tanto en esto si no hubiera enamorado de esta novela", ha reconocido.

Respecto al uso de las técnicas del género de misterio, ha comentado que requiere "una madurez narrativa y mucha habilidad". En este punto, ha precisado que más que un (Stieg) Larsson ha querido hacer un Patricia Highsmith para profundizar en los personajes y en el porqué de sus acciones.