El incremento salarial para el próximo año se situará en el 2,5%, una subida similar a la experimentada en 2011, aunque más de un punto por encima que la vivida en 2010, cuando las rentas sólo crecieron un 1,3%, según señala un informe elaborado por la consultora Deloitte tras el análisis de los datos retributivos de más de 170 empresas.

No obstante, la subida de los sueldos de los españoles este año se encuentra por debajo de la media europea, que se situó en el 3,7%, y lejos del incremento del 4,4% experimentado antes del inicio de la crisis económica.

El informe remarca que los colectivos más favorecidos por los incrementos salariales este año han sido los mandos medios y los técnicos especialistas, mientras que por sectores, el sanitario fue el que mayores subidas salariales experimentó (+2,9%) frente a la construcción, área en el que los sueldos sólo crecieron un 1,4%.

Asimismo, entre los criterios para definir el incremento salarial, el 61% de las compañías continuó vinculando salarios al IPC, aunque ya el 31% de ellas prefirió usar como referente la productividad, criterio cada vez más común y que el 45% de las empresas espera aplicar en 2012.

En lo que respecta a congelaciones salariales, el 27% de la empresas reconocieron haber congelado el sueldo de sus directivos en 2011, y el 16% de ellas prevé mantener estas congelaciones a lo largo del año próximo.

Por sectores, el análisis afirma que las compañías más partidarias de esta medida se centraron en el área financiero (28%) y en el de telecomunicaciones, medios y tecnología (32%), a la vez que remarca que las compañías del sector de la energía fueron las únicas que no aplicaron congelaciones.

Por otra parte, el informe recalca que el 94% de las compañías ofrece algún tipo de beneficio social entre sus trabajadores, siendo los más comunes el seguro de vida y el médico.

En concreto apunta, que en el caso de la prestación sanitaria el 77% de las empresas encuestadas financian el 100% de la prima, mientras que el resto suele optar por la cofinanciación entre empleado y compañía.

Además, señala una caída del uso del coche de empresa como beneficio corporativo, al ser considerado un "producto de lujo" y por estar sujeto a IVA.

En cuanto al uso de las retribuciones variables a largo plazo como motivación del profesional y unión de los objetivos de trabajador y accionistas, el 49% de las empresas dice usar este tipo de políticas, un porcentaje que escala hasta el 89% en el caso de las grandes empresas.

Sin embargo, el estudio de la consultora remarca en este punto un cambio de tendencia ya que aunque el instrumento más usado siguen siendo las stock options, cada vez son más las compañías que optan por los performances cash/shares.

Así, el 60% de las empresas preguntadas afirma emplear ciclos solapados frente a ciclos independientes, con el fin de fomentar el compromiso del empleado evitando el 'efecto salida' y permitiendo hacer correcciones durante el plan.