El presidente de la Diputación Provincial de Zaragoza (DPZ), Luis María Beamonte, ha explicado este miércoles que se está terminando de amueblar el nuevo edificio de la institución, situado en la calle Cinco de Marzo de la capital aragonesa, que está "prácticamente finalizado" y recibirá al personal de distintas áreas "escasamente en un par de meses".

En declaraciones a los medios de comunicación, Beamonte ha detallado que "ya se está amueblando" el nuevo edificio, "está acabado y le vamos a dar el uso para el que estaba previsto", de modo que estas instalaciones permitirán que la DPZ "tenga unos espacios más adecuados para el ejercicio de su propia actividad ordinaria".

Así, áreas como personal, cooperación o bienestar social se trasladarán "escasamente en un par de meses" a las nuevas dependencias, que recibirán aquellos servicios "que estaban ubicados en la planta tercera y cuarta" del palacio provincial y que mejorarán así su funcionamiento en un nuevo espacio.

El pleno de la DPZ ha aprobado este miércoles la certificación número 50 —por importe de 1.182.958,71 euros— del final de las obras de reforma y ampliación del palacio provincial, un proyecto que "si tocase hacerlo ahora —en la situación de crisis económica— ya no lo haríamos, ni nosotros ni nadie", ha comentado el presidente de la institución.

Ayuda a kenia

Por otra parte, el pleno de la Diputación de Zaragoza ha aprobado la concesión de una subvención para responder a las necesidades más urgentes de la población de Wajir (Kenia), donde se desarrollará "un proyecto social" con la ayuda de la DPZ, entre otras instituciones.

Beamonte ha deseado que las ayudas a la cooperación internacional "se sigan manteniendo a pesar de las dificultades" y ha remarcado que "nuestro deseo es que se sigan manteniendo porque hay instituciones sin ánimo de lucro que hacen verdaderas labores" en estos países.

En este caso, la DPZ aportará 20.500 euros en concepto de ayuda de emergencia para el Cuerno de África. Concretamente, los fondos aportados por la institución los gestionará Cáritas con el objetivo general de responder a las necesidades más urgentes de los distritos sur y este de Wajir, en Kenia. La ayuda se destinará a restablecer el acceso al agua de la población, así como para alimentos y para reducir el riesgo de enfermedades en la zona.