Iberdrola ha adjudicado un contrato a ocho empresas del País Vasco, por valor de 27 millones de euros, para la fabricación de equipos relacionados con el proyecto de progresiva implantación de las redes inteligentes de distribución eléctrica en España.

En concreto, los diferentes adjudicatarios se harán cargo de facilitar equipos de telegestión y de supervisión de la red de media tensión, así como de automatizar centros de transformación para la red de distribución eléctrica de la Compañía.

Las empresas vascas que se han hecho con los diversos contratos adjudicados por Iberdrola han sido Ormazabal (fabricación de armarios STAR, concentradores, equipos de supervisión de media tensión y automatización en media tensión con celdas modulares compactas); ZIV (fabricación de armarios STAR, concentradores, equipos de comunicaciones Router GPRS y Switches, cargadores, acopladores y de supervisión de media tensión) y Elecnor (armarios STAR y equipos de comunicaciones Switches).

También han resultado adjudicatarias Arteche (acopladores y equipos de supervisión de media tensión); MESA (automatización de media tensión en celdas compactas); AEG (cargadores); Enersys (baterías) y Zigor (cargadores).

Este proyecto, la última fase de un conjunto de adjudicaciones para el desarrollo e implantación de esta nueva tecnología que suman un importe de alrededor de 100 millones, supondrá, según ha destacado Iberdrola, además de una "importante" carga de trabajo para las empresas, la creación de más de un centenar de empleos.

Proyecto star

Iberdrola ha decidido extender a 10 ámbitos de actuación el desarrollo de su proyecto STAR (Sistema de Telegestión y Automatización de Red), lo que implicará actuaciones sobre 5.700 centros de transformación y un millón de contadores durante hasta finales de 2012.

La eléctrica ha señalado que numerosas empresas nacionales y extranjeras están analizando y siguiendo sus pasos en este campo, por lo que se espera que las adjudicatarias de estos contratos tengan la oportunidad de acceder a un mercado que en el futuro alcanzará en Europa los 400 millones de contadores.

Uno de los proyectos más relevantes en este ámbito es el que está llevando a cabo Iberdrola con el Gobierno vasco, a través del Ente Vasco de la Energía (EVE), que convertirá el territorio histórico de Bizkaia en una de las áreas "más avanzadas del mundo" en infraestructuras de redes eléctricas.

En concreto, cuenta con una inversión de 60 millones y se desarrollará en una amplia zona urbana de Bilbao y en Portugalete. Conllevará la adaptación de más de 1.100 centros de transformación, a los que se les van a incorporar equipos electrónicos de vanguardia, y la renovación de más de 230.000 contadores que prestan servicio a 410.000 habitantes.

Por otro lado, en la comarca de Lea-Artibai se pondrá en marcha un plan de automatización avanzada rural, con la creación de una nueva subestación inteligente.

Ventajas redes inteligentes

Las redes inteligentes van a permitir la prestación de diversos servicios a distancia, como la lectura en tiempo real del consumo de energía eléctrica, la tramitación de las altas o bajas de los contratos o la modificación de la potencia contratada.

También se va a fomentar la futura participación de los clientes en el mercado eléctrico dado que éstos contarán con la información necesaria para beneficiarse de las denominadas tarifas flexibles, que les permitirán modular su propio consumo y contribuir a incrementar la eficiencia energética, ahorrando energía y disminuyendo su factura y las emisiones de CO2 a la atmósfera.

Además, las redes inteligentes van a servir para facilitar el "progresivo" desarrollo de innovadoras iniciativas, como la implantación de la movilidad eléctrica en nuestra sociedad, una de las apuestas más claras de Ibedrola en el ámbito del desarrollo sostenible. La compañía podrá supervisar en tiempo real lo que ocurre en la red eléctrica y detectar cualquier tipo de anomalía.

Iberdrola también desarrolla en Estados Unidos, a través de la filial Central Maine Power, una red de medida inteligente que beneficiará a 620.000 clientes. En este caso, la compañía cuenta con un presupuesto de 166 millones de dólares, cubierto en buena medida (96 millones) por los incentivos -grants- recibidos desde el Departamento de Energía estadounidense.