La consellera de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente, Isabel Bonig, ha explicado este martes que las inversiones en transportes, puertos y carreteras sufren un ajuste de 14,7 millones en los presupuestos de 2012 porque "en un ejercicio de responsabilidad", ante la presente situación económica, se da dado preferencia "al pago de las infraestructuras ya contraídas frente a las nuevas licitaciones". En total, el capítulo de inversiones registra un descenso del 10 por ciento.

Bonig ha realizado estas declaraciones en la comparencia en las Corts de la Comisión de Economía para presentar los presupuestos de su departamento, que ascienden a 487 millones de euros, un 1 por ciento más ciento "a pesar de contexto generalizado de ajustes", por lo que ha destacado que se reducen los capítulos de personal un 7 por ciento y de funcionamiento un 8,8 por ciento.

Al respecto, ha justificado este presupuesto "de subsistencia", como le ha acusado la oposición, en que "estamos en una situación de subsistencia por la gestión del Gobierno socialista". "Claro que me gustaría presentar un programa de inversiones, pero en situaciones de dificultad hay que presentar un presupuesto real y austero", ha defendido Bonig, quien ha argumentado que si el Consell destina más del 80 por ciento de su presupuesto a política social, "el resto debe repatirse entre los otros departamentos".

En ese sentido, ha incidido en que estas cuentas tratan de ajustarse a los "parámetros no adecuados" de crisis económica actual en el que en "un ejercicio de responsabilidad" se "garantiza el pago de infarestructuras realizadas o en ejercución y su mantenimiento en detrimento de nuevas". Por ello, ha anunciado que las nuevas licitaciones "se harán mediante fórmulas de colaboración público-privadas para proyectos estratégicos y siempre que no computen deuda".

De este modo, ha resaltado que se trata de unas cuentas "coherentes con la realidad, responsables y viables en su ejecución". No obstante, ha señalado que pese a que "se espera un año complicado" después del 20N "se verá la luz al final del túnel, se pagarán inversiones y se empezarán a licitar obras y a llevar a cabo nuestro programa".

En concreto, las inversiones en transportes, puertos y carreteras sufren un ajuste de 14,7 millones pero ha destacado que aumentan en 9,1 millones las partidas para mantenimiento de la red de carreteras y en 3,1 para las expropiciaciones y se incluyen los 17 millones para el canon de explotación de la CV-35.

Seguirá el plan de confianza

Bonig ha destacado que el Plan Confianza se continuará en 2012 de 550 millones para ejecutar 1.077 actuaciones de las que ya se han finalizado 680, cerca de 300 están en ejecución y 50 en distintas fases de tramitación.

Respecto a viviendas, se incrementa un 1,5 millones en el mantenimiento del patrimonio público en viviendas y las actuaciones en casos históricos y ha justificado "el acuse" que han sufrido las inversiones a la "falta de financiación" del Estado.

Bonig se ha comprometido a seguir desarrollando la Estretegia Territorial de la Comunitat Valenciana, a reducir la tramitación de loS instrumentos territoriales y paisajísticos, agilizar los expedientes urbanísticos y evaluciación ambiental. De hecho, ha destacado que la aprobación del decrEto-ley sobre medidas urgentes dará impulso a la implatanción de Actuación Territoriales Estretégicas.

En el área de Medio Ambiente, ha anunciado incrementos de recursos para luchar contra la desertificación y mantenimiento de espacios naturales, así como actualizar el Plan Integral de Residuos para su aprobación antes de final de año.

"certificado de defunción"

Por contra, el portavoz del grupo parlamentario socialista, Francesc Signes, ha constatado que se tratan de unas cuentas "de subsistencia" que "renuncian a cumplir los objetivos que se habían marcado" y suponen "un certificado de defunción" de los planes presentados" ya que "solo sirven para pagar deudas y acabar algunas obra ya en marcha". Por ello, le ha conminado "a abandonar los planes faraónicos" y a proceder "a recortar de verdad los chiringuitos donde tiene colocados amigos".

Así, ha insistido en que estas cuentas demuestran "no solo la bancarrota" en que están, sino que son "un símbolo de la ineficacia de la Generalitat" y en ese sentido ha apuntado que si la gerente de FGV, Marisa Gracia, trabajase en una empresa privada "estaría ya apuntada en el INEM" por las deudas contraídas bajo su gestión.

Además, ha señalado que el actual PIE "no es una guía estratégica de nada" y al respecto ha citado en concreto los casos del TRAM de Alicante, el tren de la costa, la adecuadción Xàtiva-Alcoi. Demás, ha considerado "un insulto" la bajada de un 35 por ciento en vivienda y ha exigido una reforma urgente del IVVSA.

Del mismo modo, Juan Ponce, de Compromís, ha lamentado que en el debate se centre en la deuda pendiente por pagar y ha criticado asimismo que mientras que ha subido el presupuesto de infraestructuras el de Medio Ambiente ha bajado un 6 por ciento, lo que ha considerado "preocupante".

Asimismo, ha anunciado que su grupo persentará una enmienda para impedir la reforma de la ley forestal por "el peligro" que supone porque "es una invitación a que uno coja el merecho para lo que le parezca".

Por su parte, desde EU la diputada Esther López ha lamentado que se tratan de unos presupuestos con un crecimiento "equivocado" con además "proyectos repetidos", mientras que, por el contrario, el representante 'popular' David Serra ha defendido estas cuentas "ajustadas" porque "es lo que hoy necesita la Comunitat" ya que "se debe pagar lo que se debe" y "no dejar la deuda para los que vienen".