En otra vida, Paloma Ruiz pudo ser aventurera o saltimbanqui. Nunca ha sabido estar mucho tiempo en un mismo lugar y si algo no le gusta, lo arregla o se marcha.
"¿De profesión? Nada y todo", dice risueña. Ha sido maestra, monitora, profesora de español, dueña de una residencia de estudiantes, cuidadora de ancianos y hasta trabajó en una línea erótica.
Pasó por un divorcio en el que se quedó sin nada, tuvo problemas legales con una casera y vivió situaciones límite, casi de película.
Experimentó muchas veces qué se siente al no tener a dónde ir ni qué hacer, como si un desierto se abriera ante ella, pero su valentía siempre la ha empujado a empezar de cero.
Su ocupación actual: telemadre
Ahora trabaja de telemadre para tres clientes: prepara comida para gente que no puede o no tiene tiempo de cocinar "casero, calentito y bueno"
Cuando no hace albóndigas, bacalao con tomate o caldo, tiene otros trabajos que le permiten mantenerse a flote: atiende la consulta de un urólogo jubilado y se ha apuntado a figurante de películas.
"Tengo que empezar a pensar diferente porque la vida me lo está diciendo, pero no tengo dinero para vivir sola. Estoy pensando en volver a la primitiva idea de cuidar a alguien".
Una edad difícil
Las dificultades no son nuevas para ella, pero ahora es distinto. Paloma nota que a una persona de 50 años cada vez le cuesta más abrirse un hueco en la sociedad: "Lo de animar a la mujer a que sea emprendedora y monte su negocio ya nos lo creímos todas".
"Yo he tenido varios y es muy difícil sacarlos adelante. Los que estamos en esta situación necesitamos una voz pública que diga oye, a los 50 años no tenemos Seguridad Social y nadie nos va a dar trabajo".
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios