Un grupo de intelectuales e investigadores han puesto en marcha en Oviedo el antituo Centro de Estudios Asturianos, fundado en 1920 por nombres de la cultura asturianos de principios de siglo XX.

David Rivas, profesor de Economía de la Universidad Autónoma de Madrid, es el presidente y fue el encargado este viernes de presentar el acto de inauguración, acompañado por Chema Vega, y el gaitero Blas Rodrigo. El nuevo CEA parte con una veintena de socios, aunque aspira a aumentar su masa social.

Rivas explicó que el CEA vuelve a la actividad "con el mismo espíritu" que sus predecesores, si bien "las metodologías de estudio" han cambiado.

Los objetivos co los que nace son, según la nota elaborada a tal efecto, "defender los intereses de Asturias ante todo, la cultura asturiana en todas sus manifestaciones, el patrimonio, la llingua (luchando por su cooficialidad), además de editar una publicación, como mínimo, anual, y organizar charlas, conferencias, exposiciones y debates. Además, pretenden, recuperar, incorporar y servir de plataforma de participación a los cientos de profesores y estudiosos asturianos en la emigración, así como a las comunidades asturianas asentadas por todo el mundo.

El ahora recuperado Centro de Estudios Asturianos (CEA) fue una entidad cultural privada que se comenzó a gestar en el año 1918, por iniciativa del conde de la Vega del Sella, el marqués de la Rodriga, Aurelio de Llano y, fundamentalmente, de Juan Uría Ríu. Quedó constituido en el Paraninfo de la Universidad de Uviéu a finales de 1920 y fue inaugurado el 20 de septiembre de 1921.

Al llamamiento, respondieron un centenar de estudiosos, entre ellos Fermín Canella -rector de la Universidad de Uviéu en un momento de gran esplendor- que fue nombrado presidente honorario, formaron parte de aquel proyecto Aurelio de Llano, Juan Uría, Nicolás Soria, José Serrano, Víctor Hevia, Benito Álvarez Buylla, Leopoldo Alas Argüelles, Manuel Rico Avello, Julián Clavería y Ramón de las Alas Pumariño, entre otros.

El Centro de Estudios Asturianos y las actividades que desarrolló desaparecieron al estallar la Guerra Civil, conflicto que costaría la vida de algunos de sus miembros, como fue el caso del entonces rector de la Universidad, Leopoldo Alas Argüelles.

Críticas al ridea

En el dossier de prensa elaborado por los recuperadores del CEA, se alude al surgimiento del Instituto de Estudios Asturianos (IDEA), actual Real Instituto de Estudios Asturianos (RIDEA). En el documento, se considera que "es ésta una institución cultural pública -y contradictoriamente excluyente- dependiente de los recursos públicos del gobierno asturiano y donde están presentes una serie de miembros de marcado perfil endogámico, geriátrico y hasta antiasturiano que constituyen, desgraciadamente, una obsoleta sociedad de bombos mutuos".

En ella, señala el dossier, "se hace muy poco para defender la cultura de nuestro País y si para defender presuntos intereses personales de sus miembros". Se critica además, la "fuga de cerebros" universitarios asturianos. "Una amarga diáspora que es debida principalmente a la endogamia universitaria asturiana que tiende a favorecer la desigualdad de oportunidades de forma similar a como lo hace el real instituto", señala.