El portavoz del PSE-EE, José Antonio Pastor, ha considerado que el PNV tiene "pánico electoral" y ha afirmado que las buenas expectativas que parece tener Amaiur de cara a los próximos comicios del 20-N "significan que se ha instalado definitivamente la normalidad política". Además, ha destacado que "la pelea" del PSOE "es contra la derecha", pero ha precisado que el Gobierno vasco "está a salvo" pese a que surjan "fricciones" con el PP vasco.

En una entrevista concedida a Radio Popular, recogida por Europa Press, Pastor ha manifestado que en las elecciones generales se elige al presidente del Gobierno de España y ha subrayado que "no se dirimen disputas de nacionalistas ni sobre el derecho a decidir".

En esta línea, ha indicado que "la disyuntiva" que existe en estos comicios es que, "o gobierna Alfredo Pérez Rubalcaba o gobierna Mariano Rajoy". "Son las únicas opciones que tienen, de verdad, oportunidad de llegar al Gobierno de España", ha añadido.

En cuanto a las reclamaciones que se realizan sobre las supuestas "consecuencias del conflicto", como el tema de presos o la conformación de una mesa de diálogo multipartito, el dirigente socialista ha considerado que son "debates ajenos a la contienda electoral".

A su juicio, "el PNV necesita, de forma urgente, colocarse en el centro de la vida política", y la formación jeltzale y la izquierda abertzale "intentan colar otros debates que desvían la atención de los votantes de los verdaderos problemas del país", como la crisis económica, el desempleo o el crecimiento económico.

"Todo lo demás pueden ser temas muy importantes desde el punto de vista nacionalista, pero no son, desde luego, los verdaderos problemas del país", ha aseverado.

En este contexto, ha señalado que "la pelea" de los socialistas "es contra la derecha, que es quien puede gobernar este país como alternativa al PSOE". "Ya habrá momento en la política vasca en las que se hable de temas como el de los presos, como de todos los demás, pero cada elección es para lo que es", ha insistido.

"el pánico del pnv"

José Antonio Pastor ha destacado que el PNV "está en una cierta situación de pánico electoral ante el temor que de que los votos de Amaiur puedan superar" los suyos.

Asimismo, ha apuntado que los jeltzales "necesitan hacerse presentes en campaña para no correr el riesgo de desaparecer políticamente en un enfrentamiento muy claro y polarizado entre dos candidatos: Rajoy y Rubalcaba en el que el PNV queda muy fuera de foto", ha apuntado.

El portavoz del PSE-EE ha reiterado que los debates que la formación dirigida por Iñigo Urkullu pretende poner "encima de la mesa no son nada más que fuegos de artificio".

También se ha referido a la petición del PNV de adelanto de elecciones vascas, para afirmar que "está haciendo un poco el papel de Tancredo, de tonto útil de la izquierda abertzale, planteando esta reivindicación que no aporta nada a la estabilidad de la política vasca ni a la economía".

En esta línea, ha considerado que, de esta forma, la formación jeltzale trata de "lanzar mensajes hacia el electorado radical". "Esta legislatura terminará cuanto toque", ha advertido.

En cuanto al PP vasco, el portavoz del PSE-EE ha reconocido que "las campañas electorales siempre contribuyen a distorsionar, en cierto modo, las relaciones políticas y a crear más crispación". "Y eso, seguramente, lo vamos a observar a lo largo de esta campaña, pero, por encima de todo eso, hay una concepción de país, de Estado, de terminar este periodo de normalización política, de respeto a las reglas de juego y al estado de derecho que ha inspirado el acuerdo democrático de bases para el cambio", ha apuntado.

De esta forma, ha señalado que los populares vascos "están tan interesados" como los socialistas en mantener este Gobierno hasta el final de la legislatura. "Es posible que se compliquen las relaciones, que aparezcan fricciones y desacuerdos, pero lo fundamental creo que está absolutamente a salvo", ha dicho.

AMAIUR

Pastor ha indicado que el hecho de que se planteen "unas expectativas electorales importantes" para Amaiur "significa que se ha instalado definitivamente la normalidad política en el país y eso tiene mucho que ver con la acción de este Gobierno vasco en estos años y con la acción del Gobierno de España".

"Las políticas de firmeza, de tolerancia cero y de intransigencia hacia la violencia son las que han obligado a la izquierda abertzale a tomar únicamente el camino de las vías políticas y a ETA a hacer el anuncio de cese definitivo", ha señalado.

El representante del PSE-EE ha indicado que no le parece "especialmente preocupante" que ese mundo "pueda verse representado de forma importante en las elecciones", sino que ha considerado que "clarificará el mapa electoral, que es evidente que va a quedar reducido a cuatro partidos políticos, dos en el ámbito nacionalista: uno conservador y otro que se define de izquierdas; y otros dos en el ámbito no nacionalista: uno conservador y otro progresista".

"el eje izquierda-DERECHA"

El portavoz de los socialistas vascos ha manifestado que, "al clarificarse la situación política, aparecen dos ejes de discusión, el eje nacionalista-no nacionalista, sobre el que ha pivotado toda la transición política y la democracia en Euskadi, y ahora aparece un nuevo eje, que es del izquierda-derecha, que era impensable" en la Comunidad Autónoma Vasca "mientras existiera la violencia de ETA".

En esta línea, ha indicado que, "a medida que la izquierda abertzale se va desprendiendo de ese lastre", aunque todavía "no ha hecho todo su recorrido, es verdad que se han empezado a establecer otro tipo de relaciones institucionales y es evidente que, en materia de política económica o política fiscal, la coincidencia es mucho mayor, en muchos aspectos con responsables de Amaiur que con responsables del PP o del PNV".

"Eso no quiere decir que vayamos a plantear ningún tipo de alianza electoral ni mucho menos con el mundo de Amaiur, pero es evidente que existe más sintonía y eso se está viendo en las últimas semanas y, probablemente, se seguirá viendo en el futuro", ha precisado.

Los indecisos

Además, se ha referido a los "indecisos" de izquierdas y ha reconocido que "uno de los retos" del Partido Socialista es "movilizar a ese elector desencantado, progresista, que se considera de izquierdas, socialista, que ha vivido con preocupación, con desencanto, e incluso con cabreo, algunas de las medidas que en materia económica ha tenido que tomar este gobierno".

No obstante, ha recordado que "estas medidas, a pesar de su dureza, han conservado básicamente las señas básicas del estado de bienestar" que sólo puede garantizar el PSOE. De esta forma, ha manifestado que, si Mariano Rajoy accede al Ejecutivo, se abre la posibilidad de que se establezca "el pago de una cuota" para ir al médico o que haya necesidad de acudir a un centro concertado porque los públicos "no les dan la garantía de calidad suficiente".

Tras asegurar que su apuesta es "mantener el electorado socialista", ha recordado que Europa, "poco a poco, se va escorando más hacia el centro-izquierda y se ve cada vez con más certeza", que se conformen gobiernos socialistas.

"Europa se empieza a dar cuenta de que las políticas de derechas, que son las que han inspirado toda la gran política de la Unión Europea, no están consiguiendo hacernos salir de la crisis y están empezando a reorientar sus miradas hacia la izquierda", ha añadido, para recordar que "el continente europeo es una ola que se extiende y que también llega a España".