El director general de Desarrollo Rural del Gobierno de Extremadura, José Luis Gil Soto, ha animado a turistas y visitantes, y a la población extremeña en general, a conocer la belleza natural y las posibilidades de ocio que ofrece la zona del Valle del Jerte también en otoño y en invierno.

Se trata, según ha dicho, de unas posibilidades "menos conocidas" de esta comarca pero "más bonitas y atractivas", si cabe, desde el punto de vista turístico y cultural.

José Luis Gil Soto ha hecho estas declaraciones en la inauguración de la IX Otoñada del Valle del Jerte, un acto en el que ha estado acompañado por la directora general de Patrimonio Cultural, Pilar Merino, y que ofrecerá un variado programa de actividades culturales, repartidas por todas las localidades de la comarca jerteña hasta el 11 de diciembre.

Gil Soto ha hecho una alabanza a la "singularidad" del Valle del Jerte, y sus posibilidades turísticas, no ya por lo que ofrece y por lo que es conocida, como el cerezo en flor y sus gargantas naturales, sino por lo que puede llegar a ofrecer esta comarca del norte cacereño durante la estación otoñal, informa el Gobierno regional en nota de prensa.

El director general de Desarrollo Rural ha destacado que es importante seguir apostando desde la Mancomunidad Integral de Municipios, el Grupo de Acción Local, las Asociaciones del Valle y el propio Gobierno de Extremadura por alternativas que alarguen la estancia de los turistas a otras estaciones, añadiendo que "aquí, quien viene repite".

Además, les ha pedido a los habitantes de la comarca "un esfuerzo todavía mayor", al que ya de por sí hacen, ha dicho, para servir de "gancho para que el viajero recale en estas tierras", atrayéndoles con potenciales turísticos diferentes a los conocidos por todos.

Bienes patrimoniales

Por su parte, Pilar Merino ha reivindicado la utilidad de los bienes patrimoniales para garantizar la sostenibilidad de los territorios rurales mediante modelos productivos en los que la cultura y el paisaje generen una economía terciaria muy relacionada con los servicios turísticos.

Para la directora general de Patrimonio Cultural, hay que entender el territorio desde un nuevo concepto en el que las zonas rurales sean analizadas como una cultura con dos vertientes, la productiva y la sociológica.

"La forma de ser y de hacer de muchos de nuestros pueblos requiere respuestas inmediatas, y debemos intentar todas las Administraciones y la iniciativa privada que sobrevivan ya que afectan a la economía, a la sociedad o al medio ambiente", ha añadido Merino.