Alumnos del IES Sagasta y de Jesuitas han protagonizado la tradicional concentración contra la violencia de género que, como todos los primeros jueves de cada mes, se ha desarrollado este mediodía en la Plaza del Ayuntamiento.

En esta ocasión, la concentración ha contado con la presencia de personalidades como la alcaldesa de Logroño, Cuca Gamarra; o el consejero de Salud y Servicios Sociales, José Ignacio Nieto, entre otras autoridades locales y regionales.

Al inicio del evento, la concejala de Mujer, Conchi Bravo, ha recordado que "estamos aquí como cada mes, para hacer un llamamiento contra la violencia de género, que no cesa: ayer mismo, hubo una nueva víctima, una chica joven que es un perfil muy habitual".

"Por eso -ha añadido- hoy hemos querido contar con los jóvenes, con lo que, desde el Ayuntamiento, queremos hacer una tarea especial en cuanto a prevención".

Igualmente, ha subrayado "la labor fundamental de los profesores, porque la formación es el primer y casi el único paso para finalizar con esta lacra de nuestra sociedad".

Acto seguido, han intervenido varios jóvenes, que, como en el caso de Julián, han leído sus opiniones sobre la violencia de género, que, para este chaval, "supone estar en contra de todo lo que supone ser persona", al tiempo que ha abogado por "el cumplimiento íntegro de las condenas".

Para Estefanía, "el maltrato significa sangre y sufrimiento", por lo que ha considerado que "un hombre machista, un hombre que maltrata, no es un hombre, quien golpea, insulta y obliga no debería vivir en familia, debería estar solo para no causar sufrimiento".

Varios jóvenes han leído después una carta en la que, con palabras y tono contundentes, han recreado el caso de un hipotético vecino que maltrata a su mujer, ante el que han mostrado su "protesta" y al que han animado "a irse de la sociedad".

Por último, ha intervenido Ana, una joven universitaria, quien ha reivindicado "seguir defendiéndonos con la palabra y con concentraciones", mientras que ha afirmado que, para la violencia de género, "no hay justificación alguna".

La concentración, como es habitual, ha finalizado con un minuto de silencio de las decenas de personas presentes, que, una vez más, han alzado sus 'tarjetas rojas contra el maltrato', antes de dar término a la cita de hoy con un cerrado aplauso en recuerdo a todas las víctimas de violencia de género.