Los madrileños que estos días transiten por las calles de la capital tendrán que lidiar con unas incómodas compañeras: las hojas. Los 300.000 árboles que hay en las vías urbanas de la ciudad están en plena fase de caída y el Ayuntamiento de Madrid no reforzará la plantilla de barrenderos para la campaña otoñal, como tampoco lo hizo ya en 2010 al hilo de los primeros recortes.

"No damos abasto y Madrid está inundada de hojas", reconocen los barrenderos consultados por 20 minutos. "Al final las hojas se recogerán, pero a un ritmo mucho más lento", explican. Y tanto, ya que en 2009 –el último año en el que se contrató personal de refuerzo para la campaña de la hoja–, había entre 600 y 700 personas más dedicadas a retirarlas de la vía pública, según confirman desde la federación de servicios públicos y el área de saneamiento urbano de UGT y CC OO. De media, se contrataban 30 personas más por distrito para trabajar en noviembre y diciembre.

Las consecuencias de esta falta de manos no se han hecho esperar y las calles ya están repletas de hojas, que se arremolinan también en muchos de los 73.000 sumideros que hay en la capital. Y lo peor está aún por llegar.

"Lo que más nos preocupan es que los peatones se resbalen, sobre todo con las primeras lluvias", confirman los barrenderos, que desde el día 1 de noviembre salen a la calle para lo que se conoce como "limpieza de choque" y que consiste en equipos mixtos de barredora, sopladora y baldeadora (ésta última no siempre) que se encargan de recoger las hojas por todos los distritos. "No nos han dado orden de priorizar ningún distrito, ni siquiera Centro, Arganzuela o Chamartín, que son las zonas con más árboles", explican.

Lo cierto es que da igual, porque las hojas se acumulan por todas partes, según denuncian desde la Federación de Asociaciones de Vecinos, que trasladó el problema de la caída de las hojas en la última comisión municipal de Medio Ambiente, pero sin obtener respuesta. "No nos han contestado, no sabemos cómo piensan garantizar la recogida", denuncian.

Pero el enfado de los vecinos lo sufren en primera persona quienes manejan la escoba: "Desde la tasa de basura, en 2009, es frecuente que la gente nos increpe. No entienden cómo pagando más tienen peor servicio", se quejan los profesionales.

Por su parte, el Ayuntamiento de Madrid asegura que las hojas se recogerán y que el año pasado, a pesar del recorte, se retiraron 2,5 millones de kilos de la vía pública, un 14% más que en 2009, cuando sí se reforzó la plantilla. Además, a la hora de priorizar, fuentes municipales aseguran que las hojas que primero se recogen son las de las aceras, los sumideros, las zonas de aparcamientos de vehículos y los pasos de cebra, tanto los regulados por semáforos como los que no lo están. "Priorizamos las zonas de paso de peatones", aseguran.

La Comunidad activó este miércoles y hasta las 15.00 horas de este jueves la alerta meteorológica amarilla por fuertes vientos y abundantes precipitaciones. La Agencia Estatal de Meteorología prevé rachas de viento que en la Sierra pueden alcanzar los 80 kilómetros por hora y 70 km/h en el resto de la región. Por otra parte, se esperan precipitaciones de hasta 40 litros por metro cuadrado en toda la región. Ante esta previsión, el 112 recomienda a los peatones no transitar debajo de las cornisas ni de objetos inestables.