La Audiencia Provincial ha confirmado la pena de cinco meses de prisión para un mujer acusada de cambiar los códigos de barra de diversos artículos de Leroy Merlín, uno de ellos de un hidrolimpiadora de 425 euros por la que intentó pagar poco más de 20 euros, para comprarlos a un precio menor.

Los hechos ocurrieron en diciembre de 2010 cuando la mujer, en dos días distintos, sustituyó el código de barras de esta herramienta hidrolimpiadora primero por la etiqueta de un cepillo de 23 euros y, en otro intento, por el de un porta-manguera de poco más de 20. Además, cambió la etiqueta de un adorno navideño de 13,90 por la de un spray de 2,10 euros.

Según explica la sentencia, en su primer intento, ocurrido el 4 de diciembre pasado, la mujer solicitó a un empleado del establecimiento que le bajara de un estante superior la herramienta hidrolimpiadora y sustituyó la etiqueta con el código de barras por la del cepillo para "ocultar su precio real en el momento del pago" y lograr adquirir el producto a un precio 402 euros más bajo.

La mujer se dirigió a la caja del establecimiento donde presentó el producto con la etiqueta intercambiada, si bien la cajera descubrió la manipulación y le solicitó que pagara el precio real si quería llevársela, algo que la condenada no aceptó porque, según dijo, esa no era la máquina que deseaba con lo que volvió al interior de la tienda para obtener la que, según ella, quería, que tenía un valor aproximado de 280 euros.

Poco después, la acusada repitió la misma maniobra por una caja diferente y trató de adquirir la misma herramienta que en la ocasión anterior, algo que no logró porque la jefe de Cajas había avisado a las trabajadoras de la maniobra.

Tras ser detectada, la mujer, con iniciales M.P.P.S, abandonó el establecimiento hasta que tres días después, el 7 de diciembre, regresó al mismo establecimiento y, con la misma finalidad, volvió a sustituir de nuevo la etiqueta de la hidrolimpiadora por la del porta mangueras y también la del adorno navideño por la del spray.

Al igual que el día anterior, la mujer se dirigió a la caja dispuesta a pagar 16 euros en lugar de los 445,30 que le correspondía realmente por los productos adquiridos, lo que no logró en el caso de la hidrolimpiadora pero sí en el adorno navideño.

El centro comercial llamó a la Policía y, antes de que llegaran los agentes, la cajera detectó la manipulación de la etiqueta del adorno navideño que ya había adquirido la mujer cuando ésta ya rebasaba la línea de cajas. Tras comprobarse la manipulación efectuada en el adorno se le intervino este artículo así como el tique de compra.

Por estos hechos, el Juzgado de lo Penal número 2 de Santander condenó a la mujer a cinco meses de prisión al ser considerada autora de un delito de estafa en grado de tentativa.

La condenada recurrió la sentencia ante la Audiencia Provincial y reclamó su absolución al alegar que no concurrían los elementos del tipo penal de la estafa, algo que ha rechazado el juez de la Sección Primera, que ha desestimado el recurso de apelación, al considerar que la conducta que tuvo la mujer "constituyó engaño bastante" para "producir error" en las cajeras al superponer un código de barras por otro del mismo establecimiento e intentarlo en cajas diferentes.

De hecho, en la sentencia se recuerda que la mujer llegó a adquirir, con el mismo procedimiento de manipulación, un adorno navideño por el que pagó un precio inferior al que tenía realmente.