La Federación de Servicios Públicos de UGT-Euskadi ha advertido al Gobierno vasco y a la Diputación de Bizkaia de que "castigar" a los empleados públicos con "continuas rebajas y congelaciones de salarios" no es "una solución" para reactivar la economía.

En un comunicado, ha censurado que se "castigue a los trabajadores y al empleo público" por una crisis que "proviene del mundo financiero", a través de los presupuestos "sin negociar con los sindicatos".

El secretario general de la Federación de Servicios Públicos, Luis Mari Martínez, ha advertido de que el Gobierno vasco y la Diputación de Bizkaia "se agarran a la medida más fácil", sin "buscar alternativas" a la situación económica.

El representante sindical ha recordado que, en 2010, ya se rebajó el salario a los empleados públicos en un 5 por ciento, mientras que el IPC subió el 0,8 por ciento, y que en 2011 se "congeló" aunque los precios subieron el 3 por ciento. "Igual va a ocurrir en el 2012. Esto supone que en enero del 2013 los sueldos de los empleados publicos tendrán un desfase salarial tremendo y que habrán retrocedido al 2007, con unos precios un 12 por ciento más altos", ha lamentado.

A su entender, "estas medidas no aportan ninguna solución a la economía" ya que "nadie va a consumir" más que "lo mínimo" y, por tanto, tendrá "repercusión en otros empleos".

Tras criticar que "las administraciones públicas siguen sin respetar a los trabajadores, a los acuerdos y convenios, ha reclamado tanto al Gobierno vasco como a las diputaciones que "abran una verdadera reflexión sobre los cambios que se deben efectuar en nuestro sistema fiscal impositivo". Según ha subrayado, "las medidas que imponen de recorte de salarios a empleados públicos y trabajadores de empresas públicas sólo inciden en la reducción de gastos".