Los médicos forenses que analizaron el cadáver de la joven italiana Federica Squarise, muerta en Lloret de Mar el verano de 2008, han expuesto este miércoles en la Audiencia de Girona que la tasa de alcohol en sangre de la chica era de al menos 1,52 gramos por litro de sangre además tenía restos de dos ansiolíticos diferentes, lo que dejó las capacidades defensivas de la joven "muy mermadas".

Esta combinación afectó de manera "grave" las capacidades de Squarise —de 50 kilogramos y 1,60 metros—, y por todo ello, los forenses creen que la chica no podía defenderse ni dar su consentimiento "libre y voluntario" para tener relaciones sexuales.

"Los ansiolíticos son depresores del sistema nervioso central y provocan sedación, reducen considerablemente el nivel de consciencia e inducen al sueño, unos síntomas que se ven agravados por la ingesta de alcohol, lo que puede provocar desorientación en espacio y tiempo; incluso puede que pasara por delante de su hotel y no lo viera", ha afirmado una de las doctoras, quien ha añadido que mantenía alguna facultad, pero todas ellas muy disminuidas.

Fue asfixia por sofocación

Los forenses también han detallado que la joven murió por asfixia por sofocación, es decir, por la oclusión de los orificios bocal y nasal; un hecho que se vio agravado por la compresión torácica que ejercía presuntamente el peso del acusado, Víctor D.S. 'El Gordo', sobre el cuerpo de la chica ya que existía una "desproporción física brutal de 120 kilogramos contra 50".

Los médicos han querido dejar claro en todo momento que el cadáver llegó al Instituto Forense en un avanzado estado de descomposición ya que se tardó siete días en encontrarlo, lo que también dificultó la autopsia; de todos modos, a simple vista se afirmó que la constitución de la chica era asténica, es decir, "que era poca cosa, con pocos recursos físicos".

Además, el cuerpo tenía diferentes lesiones: moratones en ambos brazos y en la cara, provocados seguramente por la fuerza que pudo aplicar el procesado al intentar sujetarla contra el suelo; y una lesión en la zona derecha de la mandíbula, compatible con la asfixia.

También se encontraron tanto en la tráquea como en la laringe restos minerales de tierra o arena y restos vegetales; un material que, según los doctores, llega a esa zona cuando la persona está en vida porqué se necesita que esté respirando; estos restos son compatibles con que 'El Gordo' le tapara la nariz y la boca con ropa sucia ya que había estado en el suelo del parque donde presuntamente la mató.

En opinión de los forenses "es imposible" que el acusado apretara el cuello de la víctima a la vez que le tapaba la boca y la nariz, porque, según los análisis, "la víctima fue sujetada y el peso del acusado provocaría parte de la asfixia"; así, las lesiones que presentaba la joven son llamadas de defensa, pero eso no significa que pudiera defenderse.

"Solamente se podría haber hecho todo ello a la vez si la chica hubiera estado inconsciente, ya que, si no, hubiéramos encontrado más lesiones de defensa", ha apuntado una forense; y es que 'El Gordo' dijo durante su declaración en la Audiencia de Girona que le apretó el cuello y la asfixió con la ropa a la vez, una versión que contradice la que él mismo dio cuando fue detenido.

En cuanto a la posible violación, no se encontraron restos de semen en el cuerpo de la víctima y tampoco tenía lesiones en las piernas, aunque los doctores han afirmado que quizá no pudieron observarlas por el avanzado estado de descomposición.

En relación al informe psicológico del acusado, han indicado que muestra una "inclinación violenta", ya que la violencia ha estado presente en su vida y que incluso tiene cicatrices de heridas, una de ellas por arma de fuego.

"Tal como explica los hechos, muestra que hay cierta planificación y que sus funciones mentales estaban suficientemente íntegras en el momento de los hechos", han concluido.

Presentación de conclusiones

En la sesión de este miércoles también se han presentado las conclusiones; todas las partes han mantenido las penas que pedían inicialmente, es decir, el fiscal y las acusaciones popular y particular piden 30 años de cárcel por asesinato y agresión sexual, aunque el fiscal ha añadido a la calificación que el acusado drogó a la víctima suministrándole los ansiolíticos detectados en los análisis.

En las sesiones de esta semana, el fiscal ya preguntó por los ansiolíticos a la amiga y la hermana de la joven, incluso a los mossos d'Esquadra que investigaron, y todos negaron que la joven tomara estos medicamentos o que los tuviera ya que se necesita receta.

Sobre la responsabilidad civil, fiscalía y acusación popular piden 200.000 euros para los padres de Squarise, mientras que la acusación particular asciende la cifra a 380.000 euros.

La defensa también mantiene su petición de pena y considera que no debe superar los cinco años, por un delito de homicidio con algunos agravantes.