Cristina Fernández logra un triunfo sin precedentes en la democracia argentina

  • La victoria de Fernández evita la segunda vuelta y abre la puerta a la mayoría absoluta del oficialismo en el Congreso argentino.
  • Es el mayor respaldo a un candidato desde el retorno de la democracia a Argentina, en 1983, con alrededor del 55% de los votos.
  • El socialista Hermes Binner, segundo más votado, lograría el 15%.
  • El 76% de los casi 29 millones de argentinos llamados a las urnas han votado en esta jornada.
Cristina Fernández de Kirchner (i), saluda a sus seguidores junto a su hija Florencia (c) y al vicepresidente electo, Amado Boudou (d) tras vencer en las elecciones generales celebradas el domingo 23 de octubre de 2011.
Cristina Fernández de Kirchner (i), saluda a sus seguidores junto a su hija Florencia (c) y al vicepresidente electo, Amado Boudou (d) tras vencer en las elecciones generales celebradas el domingo 23 de octubre de 2011.
EFE/Cézaro De Luca
Cristina Fernández de Kirchner (i), saluda a sus seguidores junto a su hija Florencia (c) y al vicepresidente electo, Amado Boudou (d) tras vencer en las elecciones generales celebradas el domingo 23 de octubre de 2011.

La presidenta argentina, la peronista Cristina Fernández, ha logrado este domingo la reelección en los comicios generales celebrados en el país suramericano.

Escrutado el 15,5 por ciento de los votos, la candidata obtiene el triunfo con el 53% de los votos, mientras que el socialista Hermes Binner, del Frente Amplio Progresista, se coloca en segundo lugar, con el 16,98 por ciento de los sufragios.

Sin embargo, un sondeo a pie de urna encargado por el Gobierno adjudica a Cristina el triunfo con el 57% de los votos.

Más del 76% de los casi 29 millones de argentinos habilitados han emitido su voto, según datos de la Cámara Electoral.

De confirmarse este porcentaje, superior al que pronosticaban las encuestas antes de los comicios, Fernández sería respaldada con el mayor porcentaje conseguido por un mandatario desde el retorno de la democracia, en 1983.

Además de presidente y vicepresidente, Argentina también votaba este domingo a 130 diputados nacionales para renovar la mitad de la cámara baja y 24 senadores para reemplazar un tercio del cuerpo, y renueva el gobierno de nueve provincias.

Las políticas del triunfo

Fernández se ha impuesto en todo el país salvo en la pequeña provincia de San Luis -cuna del candidato presidencial Alberto Rodríguez Saá- y ha batido récords históricos en las zonas más empobrecidas. Sus candidatos se han impuesto en ocho de las nueve provincias donde se elegía gobernador ganó el oficialismo.

La moderación y los llamamientos a la unidad que han marcado el último año de gobierno, desde que enviudó del expresidente Néstor Kirchner, han sido, según analistas locales, decisivos para remontar el desgaste que había acumulado en la primera etapa de la gestión que estrenó en 2007.

Además, Fernández ha mantenido la política de derechos humanos iniciada por su esposo, con los juicios a los represores de la dictadura militar (1976-1983), ha mejorado significativamente pensiones y salario mínimo y ha profundizado en estrategias populistas de subsidios, como la asignación universal por hijo.

Políticas que, en conjunto, han permitido ampliar sus apoyos a parte de la clase media urbana como demuestra su triunfo, sin precedentes, en la ciudad de Buenos Aires, gobernada por el conservador Mauricio Macri.

Miles de personas se lanzaron a las calles de Buenos Aires tras el cierre de las urnas para participar en una fiesta popular en la Plaza de Mayo y celebrar el triunfo de su candidata, que comenzó la jornada con una emotiva evocación de la figura de Néstor Kirchner, al emitir su voto en la ciudad patagónica de Río Gallegos, donde tiene fijada su residencia familiar.

"Cristinazo"

Los comicios también estuvieron presentes en las redes sociales, como Twitter, en la que "Cristinazo" y "Binnerazo" aparecen entre los asuntos más mencionados, en alusión a la abrumadora victoria que habría conseguido la presidenta argentina, la peronista Cristina Fernández, y el segundo puesto obtenido por el socialista Hermes Binner, según los primeros sondeos. Partidarios de una y de otro luchan en los "tweets" para ver quién llega más alto en los trend topics.

En la provincia de Buenos Aires, el actual gobernador, Daniel Scioli, ha barrido literalmente, con una ventaja de más de 40 puntos, al peronista disidente Francisco de Narváez, un empresario de origen colombiano que no dudó en reconocer de inmediato su derrota.

También esperado fue el segundo lugar que logró Hermes Binner, que pasa del gobierno de la central provincia de Santa Fe a convertirse en líder de la oposición argentina como cabeza de un Frente Amplio que pretende rendir homenaje a la fuerza homónima uruguaya.

Una sorpresa, pero desagradable, se llevó el candidato radical, Ricardo Alfonsín, que apenas logró el 13,21 por ciento de votos y perdió la segunda posición que había conseguido en las elecciones primarias del pasado agosto.

La derrota de Alfonsín, que basó su campaña en tratar de emular la imagen de su padre, el fallecido Raúl Alfonsín, el primer presidente democrático tras la dictadura, probablemente llevará a la Unión Cívica Radical a revisar sus errores y replantearse su estrategia política.

El peronista disidente y gobernador de San Luis, Alberto Rodríguez Saá, se quedó con el 7,33 por ciento.

La otra sorpresa del día llegó de la mano del izquierdista Jorge Altamira, un trotskista que ya había logrado un "milagro" en las primarias de agosto al conseguir los votos necesarios para mantenerse en la lucha presidencial y que hoy se impuso a aspirantes más conocidos, como Elisa Carrió, de Coalición Cívica, la gran perdedora de la jornada.

Carrió se apuntó apenas el 1,66 por ciento de los votos y, lejos de renunciar, aseguró que liderará su reducido grupo parlamentario.

Eduardo Duhalde, expresidente, exgobernador de Buenos Aires y caudillo olvidado del peronismo, fue el otro gran derrotado de la jornada, con el peor resultado en su trayectoria política. Duhalde, que presidió el país entre 2002 y 2003 y designó sucesor a Kirchner, sólo ha cosechado 5,6 por ciento de votos, lo que tampoco le hará renunciar a la política.

Además, una de las sorpresas de la jornada fue la petición de disculpas del ex presidente Fernando de la Rúa, quien renunció a su cargo en 2001 en medio de la peor crisis en la historia del país. "Se están por cumplir diez años desde que renuncié al gobierno, si algo le molestó a alguno, si algún error cometí le pido disculpas a la gente", sostuvo el mandatario al ir a votar en la capital argentina.

Unidad nacional y tributo a Néstor Kirchner

Yo quiero convocar a todos a la unidad nacional, a que no nos distraigan con enfrentamientos inútiles", dijo la presidenta en su primera comparecencia tras la confirmación oficial de su arrollador triunfo en los comicios generales, con más del 53 por ciento de los votos y unos 36 puntos de ventaja sobre el segundo candidato.

La mandataria, por su parte, volvió a llorar este domingo al recordar a su marido y antecesor, el fallecido ex presidente Néstor Kirchner. "Es el gran fundador de la victoria de esta noche" y "sin las cosas a las que él se atrevió habría sido imposible llegar hasta aquí", afirmó Fernández.

La presidenta compareció de riguroso luto ante los cientos de simpatizantes reunidos en un hotel de Buenos Aires y se fundió en un abrazo con sus hijos, Florencia y Máximo, e incluso con la novia de éste, Agustina.

A "él", como enfáticamente la presidenta se refiere a Kirchner desde su muerte, "se le fue la mano en luchar por los sueños y se le fue la vida. Quiero que sea un ejemplo para todos los jóvenes y para todos los hombres y mujeres de la política", dijo.

"Cuando pienso en él, en el 2003 y sus 22 por ciento de votos, Dios mío, todo lo que pudo hacer, y veo hoy estos números, que son impresionantes y que agradezco infinitamente. Son números que si los pensábamos hace dos años, nos hubieran tratado de locos", admitió.

"Tengo el honor de ser la primera mujer reelecta del país. Qué más puedo querer. Lo único que quiero es contribuir con las más alta responsabilidad a seguir agrandando la Argentina", apuntó, visiblemente emocionada.

Otra de las sorpresas de la jornada fue la petición de disculpas del ex presidente Fernando de la Rúa, quien renunció a su cargo en 2001 en medio de la peor crisis en la historia del país.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento