El Hospital Vall d'Hebron de Barcelona se ha convertido este viernes en el primero de los ocho hospitales públicos del Instituto Catalán de la Salud (ICS) en cerrar su actividad no urgente y reprogramar las consultas externas durante un día laborable normal. Numerosos pacientes han acudido a las consultas externas y a los servicios de extracción de sangre porque desconocían el cierre, lo que ha creado momentos de tensión en el centro.

Ante este hecho, algunos de los concentrados convocados por las asociaciones de vecinos de Nou Barris y Sant Andreu y el Defensor del Paciente han pedido que la Junta de Personal del Hospital de notifique lo sucedido al juzgado de guardia.

Aproximadamente, unas 300 personas, entre personal sanitario, usuarios y vecinos han celebrado una concentración-asamblea frente el hospital materno-infantil del Vall d'Hebron y han decidido pedir explicaciones al gerente del hospital.

Por ello, se han dirigido en manifestación hasta el edificio del hospital general y han accedido a las dependencias de la dirección, donde les ha recibido el director del área médica, Juan Fernández, al que han pedido que llamase al gerente.

Los ánimos se han caldeado cuando Fernández no accedía inicialmente a la pretensión de los concentrados, aunque finalmente están a la espera de que una representación de los manifestantes se pueda reunir con el gerente del centro.

En el servicio de extracción de sangre del hospital también se han vivido momentos de tensión, después de que los trabajadores pidieran a sus responsables que abrieran el servicio porque llegaban muchas personas en ayunas que finalmente han tenido que regresar a sus casas sin poder hacerse la analítica.

Dentro de las medidas para ahorrar dinero, el departamento de Salud que dirige el conseller Boi Ruiz ha decretado cinco días laborables de cierre de las consultas externas de los hospitales que se llevarán a cabo, hoy, el 31 de octubre y los días 9, 27 y 30 de diciembre.