El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, y su equipo estudian abrir el debate sobre el endurecimiento del castigo a los incendiarios en el ámbito de la comunidad con una propuesta para modificar el Código penal y "aumentar" tanto las penas de privación de libertad como las sanciones pecuniarias a los autores de fuegos intencionados.

"Me parece oportuno abrir el debate", ha defendido Feijóo, en la rueda de prensa posterior al Consello de la Xunta, en la que ha subrayado que esta propuesta debe considerar "agravantes" determinadas circunstancias, como por ejemplo, la intencionalidad en días de "máximo riesgo". "Es una intencionalidad más tendenciosa si cabe que prender en días de menos riesgo", ha alegado.

Igualmente, el presidente ha cifrado en 1.635 incendios forestales notificados entre el 1 y el 19 de octubre, más de los registrados en los meses de julio y agosto "juntos". De ellos, 689 se produjeron en Ourense, 377 en Lugo, 348 en Pontevedra y 221 en A Coruña. "Las mentiras en materia de incendios no caben en el Gobierno gallego", ha advertido Feijóo, tras subrayar que estos son los datos que proporcionan los jefes de distrito, que "no mienten".