El consejo de administración de NCG Banco ratificará este lunes en A Coruña la entrada de los representantes nombrados por el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), en una reunión marcada por la fuerte polémica generada por las elevadas indemnizaciones de los exdirectivos de Novacaixagalicia con su salida de la entidad.

El fondo de rescate estatal nombró el pasado lunes a sus tres representantes en el órgano de gobierno del banco de Novacaixagalicia, en el que el FROB controla el 93%, tras haber inyectado 2.465 millones de euros. Se trata de José Antonio Portugal Alonso, economista y exdirectivo del BBVA y de Banesto; José Borrue Asensio, procedente del BBVA; y Joaquín Saurina Maspoch, exdirector de control de Caixa Girona y director financiero y de riesgos de Bankpime.

En medio de las polémicas por la pensión vitalicia de la que era directora de la CAM —que fue intervenida—, María Dolores Amorós, y las indemnizaciones recibidas por exdirectivos de Novacaixagalicia, en la que la aportación pública fue de 1.165 millones en el momento de la fusión de Caixa Galicia y Caixanova y de casi 2.500 millones ahora, el FROB avanzó que, con su entrada en las cajas que lo necesitasen, iniciará una revisión de las condiciones y los contratos de los altos ejecutivos que ya abandonaron las entidades.

En el caso de la caja gallega, las indemnizaciones percibidas por cuatro exdirectivos que tenían contratos blindados —el director general, José Luis Pego; el adjunto, Javier García de Paredes; uno de los responsables de la oficina de integración, Óscar Rodríguez Estrada, y el director del grupo inmobiliario, Gregorio Gorriarán— superaron los 20 millones de euros.

Por su parte, la nueva cúpula de la entidad gallega, capitaneada por el presidente de NCG Banco, José María Castellano, y el consejero delegado, César González-Bueno, ha avanzado que los contratos del nuevo equipo no estarán blindados y se ligarán a cuestiones como la productividad y los resultados. Para marcar el cambio respecto a la anterior dirección, la entidad baraja hacer una auditoría interna para comprobar que los contratos de los antiguos altos ejecutivos cumplieron las normas.

Así, el consejo de administración de este lunes revisará las indemnizaciones millonarias que percibieron varios directivos al abandonar Novacaixagalicia y tomará decisiones al respecto. Los partidos políticos gallegos han demandado la devolución de las retribuciones, mientras que el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, envió esta semana una carta al gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, en la que le demanda que "rectifique" y que "deje sin efecto" las indemnizaciones millonarias.

El consejo quedará integrado ahora por 12 miembros, entre los que se encuentran, además de los tres representantes del FROB, José María Castellano como presidente ejecutivo; César González-Bueno como consejero delegado, Jaime Trebolle, Roberto Tojeiro, Carlos González, José Manuel Gabeiras y Xabier Alcorta como consejeros independientes; y Mauro Varela y Julio Fernández Gayoso —copresidentes de Novacaixagalicia— como consejeros dominicales.