La Junta de Andalucía ha dado la aprobación definitiva para que los siete chiringuitos de la zona La Malagueta-La Caleta se conviertan en concesionarios y puedan obtener una estabilidad durante 15 años y no una autorización administrativa por un año como hasta ahora.

Así lo ha comunicado la concejala de Playas, Teresa Porras, quien ha informado de que este viernes se recibió un escrito en su área remitido por la delegación de Medio Ambiente, en el que se da el visto bueno a las demandas realizadas por el Consistorio.

Mientras tanto, los dos establecimientos de la zona de Guadalmar deberán esperar a que se solventen unos trámites antes de pasar a ser concesionarios, según han informado desde el Ayuntamiento de la capital malagueña en un comunicado.

El pasado 26 de septiembre, la concejala de Playas y los delegados de la zona Este y Oeste de la Asociación Provincial de Empresarios de Playas de la Costa del Sol, Juan José Aguilar y Servando Cidoncha, respectivamente, denunciaron el retraso que llevaba el visto bueno de la Junta.

En la denuncia pública se recordaba que los empresarios de los chiringuitos de La Caleta-Malagueta y Guadalmar llevaban "más de dos años" esperando el cumplimiento de la promesa del Gobierno regional, anteriormente de la Administración central, de que estos nueve establecimientos pudieran pasar a ser concesiones de 15 años prorrogables, como desde 2004 lo eran los establecimientos de la zona de La Misericordia.

Así, a 15 días de la denuncia, el escrito recibido por el Ayuntamiento supone dar "un paso de gigante" de cara a que "en breve" se inicien los trabajos de adaptación, con un nuevo diseño de estos establecimientos hosteleros, han valorado.

Hasta ahora, estos negocios de la playa han trabajado con autorizaciones administrativas anuales y con carácter estacional, con "el consiguiente perjuicio para los establecimientos y su funcionamiento; mientras que los de La Misericordia sí ostentan desde 2004 una concesión que les permite abrir todo el año y hacer un mantenimiento de las instalaciones.

Estas mismas fuentes han explicado que "todo ello repercute a favor de los usuarios locales y turistas y de la imagen que se ofrece de la ciudad y sus playas", al tiempo que han recordado que el carácter "más permanente" de las concesiones supone un incremento de la actividad laboral y un aumento de puestos de trabajo.