El Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de Cantabria ha mostrado su preocupación por el hecho de "haberse perdido en todos estos años la oportunidad de tener tren de alta velocidad" en Cantabria, ya sea a Bilbao o a Madrid y ha lamentado el hecho "aparente" de que se haya bloqueado absolutamente la tramitación administrativa de las futuras obras.

Además, ha incidido en la idea de que, aunque en la coyuntura actual sea "impensable" que comiencen las obras en un período a corto plazo, los proyectos y toda la tramitación administrativa de los mismos "deben ir adelante y estar finalizados lo antes posible a fin de ganar tiempo".

El Colegio lamenta que se haya dejado también "de lado" la posible optimización de la actual línea Santander-Palencia y que, según fuentes consultadas en el Ministerio, "podría dejar en un futuro el trayecto Madrid-Santander en tres horas y media con llegada a la estación de Chamartín, prácticamente el centro de Madrid, lo que lo convertiría en una interesante alternativa".

Paralización de la obra publica

El Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de Cantabria ha realizado estas reflexiones con motivo de la reunión que su presidente, Enrique Conde Tolosa, ha mantenido con el delegado del Gobierno en Cantabria, Agustín Ibáñez, al que ha mostrado su preocupación por la situación de parálisis que atraviesa la construcción de obra pública en Cantabria.

El decano considera "inadmisible" el "injusto trato" que ha recibido Cantabria y lo "malparada" que ha salido la región con el recorte de la obra pública, en comparación con otras regiones limítrofes.

Conde Tolosa estuvo acompañado en la reunión por Amador Gafo Álvarez, vocal de la Junta de Gobierno y María Consuelo de Celis Arias, secretaria general de la organización colegial. Por su parte, el delegado del gobierno estuvo acompañado por Benjamín Piña, director del Área de Fomento de la Delegación del Gobierno.

El Colegio de Caminos señala en un comunicado que la reunión transcurrió "en un clima de absoluta cordialidad", tratando temas de actualidad que preocupan al Colegio de Caminos, principalmente la paralización de las infraestructuras en Cantabria desde julio de 2010.

Así, se habló de las carreteras de San Glorio y Los Tornos y las autovías Aguilar-Burgos y del Cantábrico y, según destaca el Colegio de Caminos, ambas partes coincidieron en "la necesidad perentoria" de que se desbloquee la paralización de la Solares-Torrelavega.

Según el Colegio, el delegado adelantó que se está negociando con las empresas constructoras y que espera que las obras de la Solares-Torrelavega se reanuden "en breve", pero que el resto quedará pendiente para el próximo Gobierno de la Nación, una vez constituido tras las elecciones generales de noviembre.

También se habló de la difícil situación que atraviesa todo el entramado empresarial vinculado al sector de la construcción que depende de la obra pública en Cantabria y, en especial, de la "excelencia" de las empresas de ingeniería de la región.