Los 40.000 empleados públicos del Gobierno de Aragón podrán beneficiarse en breve del Plan Concilia, que ofrece ayudas para dedicar más tiempo a la familia sin perjuicios en el trabajo. El convenio fue firmado ayer por los sindicatos y la DGA y su aplicación conllevará un coste aproximado de tres millones de euros al año.
Aragón es la primera comunidad que pone en marcha esta iniciativa, que permitirá, entre otras cosas, ausentarse del puesto laboral para acompañar a un hijo al médico, cuidar a un familiar enfermo o someterse a técnicas de reproducción asistida.
El convenio aragonés se basa en el acuerdo alcanzado en el ámbito estatal, pero mejora varios de sus puntos, principalmente en los permisos de maternidad y paternidad, en las excedencias y en las bajas por enfermedad grave de familiares.
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