El Juzgado de lo Penal número 4 de Jaén ha condenado a tres operarios, pertenecientes a una empresa especializada en tareas forestales, por provocar un incendio en el paraje denominado Fuente del Oso del monte Público Navahonda, en el interior de la Sierra de Cazorla, cuando se encontraban realizando labores de "tratamientos selvícolas preventivos" en febrero de 2009.

Según la sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, los trabajadores se hallaban realizando labores de limpieza de residuos forestales mediante el uso del fuego siendo un encargado y dos operarios los que estaban haciendo dichas tareas. Así, procedieron a realizar varias hogueras, una de ellas dentro de la masa arbórea y omitiendo "las más elementales normas de cuidado dada la calificación del lugar como Parque Natural, la cercanía de la masa forestal, la existencia de fuertes rachas de viento y la declaración de la zona como zona de peligro de incendio".

Asimismo, según detalla el fallo del Juzgado de lo Penal, "abandonaron el lugar dejando la hoguera sin apagar provocando con su proceder que a consecuencia de las rachas de viento existentes se propagase el fuego de la hoguera al monte forestal circundante iniciándose un incendio forestal" que fue detectado por los efectivos del Plan Infoca y que fue extinguido en la madrugada del 28 de febrero de 2009, seis horas más tarde de su inicio.

La sentencia relata además que resultó afectado un total de 5.000 metros de terreno forestal de los cuales 200 metros corresponden a pinos, resultando quemados once pinos y 3.000 metros de matorral, si bien existió "un elevado riesgo de propagación ladera arriba y su desarrollo libre y, de no haber intervenido los medios de extinción, hubiera generado una superficie quemada de elevada magnitud".

No obstante, como se ha destacado en dicho fallo, el encargado de los trabajos, también condenado, "tan pronto conoció la existencia del incendio forestal se trasladó al lugar junto con otros trabajadores para colaborar con los efectivos del Plan Infoca en las labores de extinción".

Así las cosas, el Juzgado de lo Penal ha estimado condenar a tres meses de prisión a este encargado, como autor de un delito de incendio forestal por imprudencia grave, así como a una multa de tres euros al día durante tres meses. A los operarios se les ha condenado por el mismo delito a seis meses de cárcel y a una multa de tres euros diarios durante un total de seis meses. Además, en concepto de responsabilidad civil, indemnizarán al Plan Infoca en más de 700 euros, siendo responsable civil subsidiario la empresa a la que pertenecían.