El presidente del PP y candidato 'popular' a la Presidencia del Gobierno, Mariano Rajoy, ha mantenido un encuentro este viernes en la capital con los representantes de la vida económica, política y cultural de Málaga.

Al acto, que ha tenido lugar en la Alcazaba de la capital de la Costa del Sol, además de Rajoy, el presidente del PP-A, Javier Arenas; la secretaria general del PP, Dolores de Cospedal; la vicesecretaria general de organización y Electoral del partido y directora de la campaña electoral del PP, Ana Mato; el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, y el presidente de los 'populares' malagueños, Elías Bendodo, entre otros.

Así, durante el mismo, Rajoy ha destacado que Málaga es una provincia que, "como todas, está pasando por dificultades", sin embargo, "es una provincia con mucha pujanza, que ha crecido mucho en los últimos tiempos y que tiene mucha potencialidad de cara al futuro".

El líder nacional de los 'populares' se ha mostrado "muy contento" de estar en esta ciudad y ha destacado que tiene la oportunidad de estar en muchos lugares de Andalucía y también en municipios y pueblos pequeños de Málaga y de otros lugares para "conocer más la realidad que escucho" y, por tanto, "saber mejor lo que le preocupa a la gente, cuáles son las inquietudes y cuáles son las posibilidades de una zona que para España es muy importante".

Ha apuntado que Andalucía son unos ocho millones de españoles y "tiene sus dificultades como todo el mundo, pero yo siempre he creído que Andalucía tenía personas y potencial".

Por otra parte, ha resaltado la convención nacional que está teniendo lugar en Málaga desde este pasado jueves hasta el sábado, donde, según ha dicho, se está planteando, entre otros factores, "qué es lo que creemos que hay que hacer de cara al fututo".

Ha indicado, de igual modo, que "las cosas están difíciles, para que vamos a engañarnos, esto está muy complicado". En este sentido, se ha referido, también, a que la agencia de calificación crediticia Fitch Ratings ha rebajado en dos escalones la nota de solvencia de España, lo que ha tachado de "mala noticia" para el país. "Las cosas están muy complicadas, están difíciles", ha insistido.

No obstante, ha señalado "que las cosas se pueden arreglar, es más creo que se van arreglar", aunque ha dejado claro que "no se van arreglar en media hora, nadie tiene una barita mágica ni es tan listo como para resolver los problemas por los que estamos pasando en medio minuto".

Ha indicado que "esto va durar su tiempo" y ha insistido en que hay que ser capaces "de actuar con seriedad y generar confianza, a eso es a lo que aspiramos nosotros: a ser serios, a ser las cosas bien y hacer las cosas después de pensarlas y reflexionarlas". Por último, ha indicado que "este país tiene grandes posibilidades".