El comité ejecutivo de la Confederación Empresarial de Comercio de Andalucía (CECA) ha decidido tras su última reunión, celebrada este viernes en Sevilla, solicitar al Gobierno andaluz que derogue la norma que regula el impuesto sobre las bolsas de plástico de un solo uso de los Presupuestos de la Junta de Andalucía para 2012.

En una nota, la CECA ha explicado que los motivos principales tomados en consideración para solicitar la supresión de este impuesto son la "dificultad" de aplicación de esta tasa en los pequeños y medianos comercios andaluces; la "escasa recaudación" obtenida por su cobro, pues estiman que la Junta "sólo ha ingresado, aproximadamente, un uno por ciento de lo previsto"; y la "rápida concienciación ciudadana sobre el uso de bolsas respetuosas con el medioambiente".

A ellos, se añade el hecho de que, tras el anuncio realizado por Cantabria, de eliminar este mismo tipo de impuesto de sus presupuestos regionales del próximo año, Andalucía sería en 2012 "la única región española en contar con este tributo", lo que supone, a su juicio, "un agravio comparativo".

Para la CECA, "en un contexto de grave contención del consumo y de crisis económica generalizada esta medida recaudatoria no contribuye a mejorar la situación del comercio andaluz sino que, por lo contrario, dificulta aún más su recuperación".

Asegura que el sector comercial "es consciente de la necesidad de reducir el número de bolsas de plástico de un solo uso y, en tal sentido, ya viene trabajando de forma unilateral en esa línea poniendo en el mercado estrategias y productos con esa finalidad".

"Nuestro compromiso con el medioambiente es claro y, en este sentido, estamos totalmente de acuerdo con que se adopten medidas para lograr la sostenibilidad medioambiental pero para alcanzar este objetivo consideramos que son más eficaces otras iniciativas, como las campañas de sensibilización y concienciación entre los ciudadanos", señala el presidente de CECA, Manuel García-Izquierdo Parralo.

Coste de adaptación

No obstante, y a pesar de no estar de acuerdo con la medida recaudatoria adoptada por la Junta —que estipula el cobro de cinco céntimos de euro por cada bolsa de plástico de un solo uso suministrada en 2011 y 10 céntimos de euro a partir de 2012—, los comercios andaluces "han realizado un esfuerzo económico y personal para poder aplicarla en sus establecimientos, ya que para poder hacer efectiva su ejecución han tenido que llevar a cabo la adaptación de sus sistemas financieros, contables, informáticos y de caja".

CECA estima que los costes medios asumidos por cada comercio en estos conceptos así como en la tramitación y gestión del impuesto, formación de los trabajadores y comunicación a los consumidores oscilan entre los 300 y los 500 euros y agrega que a este coste económico hay que sumarle las "importantes dificultades técnicas" a las que el sector ha tenido que hacer frente para aplicar el impuesto.

Por último, la CECA ha manifestado la "incertidumbre" en el sector desde la aprobación de este impuesto ante la "falta de respuestas claras" por parte de la Administración a la hora de solventar las dudas generadas por su aplicación "y ello a pesar de habilitarse un Centro de Información y Atención Tributaria para la resolución de problemas".

"Desde el principio, ha habido ambigüedad y falta de claridad sobre muchos aspectos planteados por los comerciantes sobre, por ejemplo, la contabilización y gestión del impuesto, sobre el régimen sancionador, entre otros aspectos", ha resaltado CECA.