El alcalde de Burgos, Javier Lacalle, ha hecho este miércoles un balance "muy positivo" de sus 100 primeros días de Gobierno local, por las "decisiones calve" que se han tomado respecto a algunos de los principales proyectos de legislatura.

"Si algo no se pude decir es que no ha habido gestión o trabajo"; ha aseverado Lacalle, antes de añadir que "han sido 100 días de gestión en los que se han tomado decisiones clave de los proyectos de legislatura".

En este sentido, ha destacado el "compromiso realista" adoptado en materia económica, como la aprobación del Plan de Austeridad y la congelación de los tipos impositivos de los impuestos municipales para 2012, así como los avances experimentados en los principales proyectos urbanísticos y de infraestructura.

En concreto, ha destacado la "importancia" de la convocatoria pública para la construcción del nuevo bulevar en la calle Vitoria y lo relativo a la aprobación del Plan Gamonal, como "dinamizador" del populoso barrio.

Por otro lado, alabado la reducción de la deuda municipal desde mayo en 3.000.000 de euros, hasta situarla en 160.000.000 de euros, lo que supone un 80 por ciento de la capacidad de endeudamiento del Ayuntamiento de Burgos, y ha pronosticado una "sensible reducción" a finales de 2011, que se acentuará en 2012 con algunas de las medidas adoptadas.

Respecto a las cuestiones pendientes, ha lamentado los escasos avances producidos en relación a la ampliación de la depuradora de aguas residuales, así como los retrasos en relación a la aprobación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU).

Por último, ha confiado en que si se produce un cambio de Gobierno en las elecciones generales de noviembre se mejore el diálogo con el Ejecutivo central y se fomente una relación de mayor fluidez.

"Mejorará el diálogo aunque no cambiaremos nuestro discurso porque cada responsable político debe defender la administración a la que representa", ha concluido Lacalle en declaraciones a los medios.