La mitad de los ciudadanos de las Islas Baleares reconoce que su hijo tiene o ha tenido piojos, mientras que uno de cada cuatro adultos admite haber estado infestado en algún momento de su vida. Los niños de infantil y primaria son los más susceptibles de contraer pediculosis, debido a los hábitos de juego.

Los datos se desprenden de la 'encuesta Filvit', que ha sido elaborada y publicada por la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria (SEPEAP) y el Centro de Información de la Pediculosis.

Teresa Bonnín Sánchez, farmacéutica colaboradora con el Centro de Información de Pediculosis, ha señalado que "el comienzo de las clases es quizá el de mayor riesgo de contagio" dado que "muchos niños vuelven de las vacaciones con piojos, y se dan las condiciones de calor y de contacto frecuente entre cabezas".

A pesar de ello, la encuesta Filvit ha revelado que la mayoría de los infestados de Baleares no consulta al farmacéutico. Sólo el 16 por ciento dijo que iría al farmacéutico en caso de contraer piojos para que le dispensara un tratamiento adecuado.

Respecto a este dato, Bonnín ha añadido que "es muy recomendable acudir al médico o al farmacéutico cuando hay un caso de piojos y aplicar un protector a los niños y adultos del entorno para evitar el contagio", Además, la farmacéutica ha asegurado que "con una aplicación es suficiente para evitar que se propaguen por el entorno familiar".

Falsas creencias

El estudio elaborado por la SEPEAP y el CIP ha detectado la extensión de algunos fasos mitos en torno a la pediculosis, como el hecho de que 6 de cada 10 entrevistados baleares asocien la suciedad del pelo con el riesgo de contagio.

"Los piojos no tienen nada que ver con higiene, nivel socioeconómico o hábitos de vida. Es más, muestran cierta preferencia por el pelo limpio", ha manifestado el doctor Carlos Marina, pediatra colaborador con el Centro de Información de la Pediculosis. Sin embargo, 1 de cada 5 entrevistados han confesado que se sentirían avergonzados en el caso de que sus hijos tuviesen piojos.

Además, según la encuesta, dos tercios de los interrogados creen que se puede combatir los piojos cortándose el pelo. El doctor Marina ha indicado que ese método solo resulta eficaz si rasura la cabeza por completo, "un método que sería excesivo, ya que afectaría a la autoestima y contribuiría a estigmatizar al niño", ha puntualizado.

El especialista ha recomendado tratar la infestación por piojos "con champús y lociones pediculicidas de dispensación farmacéutica" y lavar a más de 60 grados la ropa que ha estado en contacto con la persona afectada. Carlos Marina ha añadido que "los niños y mayores del entorno deben aplicarse un producto protector".

Por otro lado, más de 6 de cada 10 encuestados ha confesado que ha recurrido al vinagre para hacer frente a la invasión de piojos, "un remedio eficaz para desprender las liendres (huevos) pero no tanto para eliminar los piojos, y que es rechazado por los niños debido a su intenso olor", según ha advertido la doctora Aurora Guerra, dermatóloga colaboradora con el Centro.

Esta especialista ha recordado que "existen productos en la farmacia para el tratamiento y la protección frente a la pediculosis con olor agradable para los niños, lo que influye en la adherencia y evita se convierta en un motivo más de estigmatización". En ese sentido, 4 de cada 10 entrevistados consideraron el olor como una característica importante a la hora de elegir un pediculicida o un protector contra los piojos.

En cuanto a los padres, la encuesta Filvit ha constatado que parecen estar concienciados de la necesidad de informar a su entorno ante un posible contagio. De hecho, 9 de cada 10 padres de la Comunidad Balear afirman que avisarían al colegio en el caso de descubrir que sus hijos tienen piojos, y el 84 por ciento tomaría medidas protectoras con el resto de la familia para evitar el contagio.

Sin embargo, 4 de cada 10 padres ha afirmado que dejaría de llevar a su hijo al colegio por unos días en caso de presencia de piojos, y el 15 por ciento ha asegurado asegura que sacaría a su hijo del colegio ante una infestación solo si el centro se lo recomendara.

Sin embargo, para la doctora Guerra "no es necesario sacar a los niños del colegio, en el caso de que nuestros hijos tengan piojos basta tratarse e informar al centro educativo y cuando son otros niños los afectados es suficiente utilizar un producto protector una sola vez".