El Partido Pirata de Alemania (Piratenpartei) ha irrumpido en el Parlamento de Berlín al obtener el 9% de los votos en elecciones legislativas de la ciudad-estado que han supuesto un nuevo duro revés al partido de Angela Merkel. Los berlineses abren así sus puertas por primera vez en un hemiciclo a los piratas, que obtienen 15 de los 130 escaños.

Casi tan llamativo como la gran cantidad de votos cosechados por el Partido Pirata es que es posible que tenga a su disposición más escaños que el total de sus candidatos, con lo que algunas sillas podrían quedar vacías.

El Partido Pirata de Alemania se fundó en 2006, siguiendo la estela de los piratas suecos, que habían nacido ese mismo año. En España se constituyó legalmente en 2007. Se trata de un partido que busca la defensa de los derechos y libertades de los ciudadanos, con un matiz significativo hacia la defensa y el impulso de las nuevas tecnologías.

Actualmente, el Partido Pirata tiene representación en 39 países de todo el mundo, incluyendo Alemania, España, Francia, Reino Unido, Italia, Suecia, Argentina, Brasil y Estados Unidos. Todos los partidos están coordinados por la Organización Internacional de Partidos Piratas (Partidos Pirata Internacional) o PPInternational (PPI).

En su ideario se sienten reflejados los menores de 50 años, urbanitas y de izquierda liberal. Entre sus propuestas electorales en Alemania destacan el wi fi gratuito, transporte público, legalización de las drogas blandas, ninguna subvención a las religiones y el voto para los mayores de 14 años.

El instituto Forschungsgruppe Wahlen explicó que tan solo un 10% de los electores de Los Piratas les votaron por su programa, muy limitado y superficial en temas relevantes de la política local, y que el resto lo hizo por su carácter rebelde y como protesta contra los partidos políticos establecidos.

Quienes han estudiado el proceso electoral alemán dicen que los votos de los piratas proceden de jóvenes, en su mayoría universitarios, que piden transparencia política y que despotrican contra el actual modelo de político profesional.

Los 'hermanos mayores' suecos celebraban también la victoria obtenida por la formación en Berlín. "La victoria de uno es la victoria de todos", defienden. Están convencidos de que el alemán es el primero de una serie de grandes triunfos electorales por medio mundo. El partido cuenta también con un escaño en el Parlamento Europeo.

El Partido Pirata de España, fundado en 2007, actualmente busca lograr representación nacional a través de una página web en la que pide el apoyo para poder presentarse a las próximas elecciones. En su ideario se casan con los 'indignados' y la revuelta del 15-M.

El partido espera ahora poder conseguir el apoyo del 0,1% de los ciudadanos, necesario para participar en los comicios. La última reforma de la Ley Electoral, aprobada con el apoyo de los grupos parlamentarios del PSOE, PP, CiU y PNV, obliga a los partidos sin representación parlamentaria a justificar su candidatura a las próximas elecciones.

Su portavoz, Daniel Riaño, califica de "impresionante", la victoria germana y cree que en España podrían dar también la sorpresa. "El momento es el propicio", explica a 20minutos.es, "porque la gente empieza a darse cuenta de que hay derechos por preservar en la era de las nuevas tecnologías y porque hay mucha gente cansada de la política tradicional y dispuesta a explorar nuevas alternativas".

Por su parte, el Partido Pirata de Cataluña consiguió, por primera vez en la historia del partido en España, representación en dos ayuntamientos de municipios de Cataluña en las pasadas elecciones regionales de mayo. La candidata del partido a la alcaldía de Sant Fruitós de Bages, Manoli Martín, se convirtió en "el primer cargo electo del partido".

"No somos un partido friki, no pedimos tonterías. Somos el partido más serio: pedimos acceso al conocimiento, transparencia total y democracia directa: sólo un friki puede decir friki a una propuesta como esta", dicen en su web.