Una familia, vecina de Garrovillas de Alconétar (Cáceres), ha denunciado ante el Juzgado de Primera Instancia número 1 de Cáceres la muerte de su hija por presunta negligencia médica durante el parto efectuado en el hospital cacereño San Pedro de Alcántara.

Según han declarado los familiares de la pequeña a Europa Press Televisión, a su juicio, la causa de la muerte de la pequeña es que el facultativo de guardia "quería el parto natural" y "no" le hicieron "la cesárea a tiempo".

"La han matado y la han sacado ya cuando no había remedio y tuvieron que hacerle la cesárea obligada en el último momento cuando se la podían haber hecho el primer día, que la deberían haber hecho, y haberla sacado con vida, porque la niña estaba perfecta", ha recalcado el abuelo.

Según ha relatado José Paz, su nuera ingresó el pasado lunes a las 9 de la mañana por "parto natural" y según le comunicó el médico titular del caso al facultativo de guardia, "la niña tenía que salir ya" al haberse producido el desprendimiento de "líquido amniótico".

Hubo "sufrimiento fetal"

El abuelo de la pequeña ha explicado que los facultativos estuvieron todo el lunes y la mañana del martes "intentando provocar el parto" pero que la mujer "no dilataba lo suficiente" y que a las cinco de la tarde se tuvo que realizar una "cesárea de emergencia" después de que el feto sufriera "un paro cardiaco".

"Se notaba que había estado sufriendo dentro, por querer salir y no dejarla" ha declarado José Paz después de que la familia haya conocido la "autopsia visual", de la que ha añadido que aún están pendientes las pruebas de laboratorio.

El padre de la niña, Iván Paz, ha interpuesto una denuncia contra el facultativo de guardia que atendió su caso ya que le pidieron "varias veces" que "sacaran" a la niña porque consideraba que aquello "no era normal".

"Yo sabía que me la estaban matando desde por la mañana", ha aseverado Iván, que también ha afirmado que se encuentra "por los suelos" ya que "ha perdido una hija por culpa, de entre comillas, una persona".

El facultativo salió custodiado

Por otro lado, la Consejería de Salud y Política Social de la Junta de Extremadura ha informado a Europa Press de que sus servicios jurídicos van a "analizar el tema para dar soporte jurídico al facultativo" del que añaden que "fue agredido, y tuvo que ser custodiado y protegido por la policía". La familia niega que hubiera "agresión física".

"Verbalmente hubo muchas cosas" ha indicado el abuelo de la pequeña, que ha apostillado que "no" se pusieron "violentos" sino "muy nerviosos" pero que al facultativo "no se le ha tocado".

"Es la impotencia que tiene uno como yo, que soy el padre, de que salgan y te digan que está muerta tu hija, eso no es plato de gusto para ningún padre, para ninguno", ha apostillado el padre. PROTOCOLO

A su vez, el presidente del Colegio de Médicos de Cáceres, Carlos Arjona, ha declarado también a Europa Press que la actuación del facultativo se encuentra "dentro del protocolo" por lo que su actuación fue "normal" y ha afirmado que aunque "lamenta" el fallecimiento de la niña, en este caso "no había ningún síntoma de alarma" para la realización de una cesárea previa.

Asimismo, en un comunicado de prensa, ha anunciado que el citado colegio se presentará como acusación particular ante la "denuncia" que está elaborando el Servicio Extremeño de Salud contra la familia por "los insultos que profirió al facultativo".

Arjona ha afirmado que la mujer ingresada estaba "monitorizada y estable", y ha explicado que "unas alteraciones en el ritmo del bebé hizo que el ginecólogo y la matrona de guardia decidieran actuar haciéndole una cesárea, continuando así con el protocolo".

Ha añadido que ahora los forenses serán quienes determinen el motivo del fallecimiento del bebé aunque según ha dicho del colegio "no se puede achacar que el ginecólogo que practicó la cesárea haya sido el causante de la muerte".

"Lo normal es dejar evolucionar el parto a no ser que haya antecedentes, que la dilatación no sea buena o si el feto viene en una postura inadecuada", ha afirmado el presidente.

En este caso ha recordado que "en todo parto hay probabilidad de fallecimiento de bebés", una tasa que "está por debajo del 2x1.000 en España".

Asimismo, Carlos Arjona ha calificado de "lamentable" la situación por la que está atravesando la familia del bebé fallecido, aunque ha mostrado su repulsa ante la "agresión verbal" que sufrió el doctor asegurando que "en ningún momento se puede tolerar que un facultativo reciba una agresión bien sea física o verbal".