La portavoz del PSE-EE en las Juntas Generales de Gipuzkoa, Rafaela Romero, ha augurado que para el mes de octubre pueda ponerse en marcha la ponencia en materia de pacificación en esta Cámara y se ha mostrado convencida de que "será posible" un acuerdo. Por su parte, ha asegurado que el PSE "nunca ha sido un obstáculo para la paz ni lo va a ser".

En una entrevista concedida a ETB, recogida por Europa Press, Romero, que preside la Comisión de Igualdad y Derechos Humanos de las Juntas guipuzcoanas, ha explicado que "si al final hay un acuerdo, y creo que será posible, la solicitud de ponencia del PNV se desarrollará por primera vez en Gipuzkoa y al final será de todos los grupos".

En función de los plazos previstos para su tramitación, la ponencia podría ponerse en marcha en el mes de octubre, según ha indicado la portavoz socialista, que ha afirmado que, por su parte, el PSE "nunca ha sido un obstáculo para la paz y tampoco no lo va a ser en Gipuzkoa".

La juntera socialista ha manifestado que el lehendakari, Patxi López, está trabajando en su plan de paz, que tiene previsto presentar en el Pleno de Política General este mes, "con ahínco y se está arriesgando mucho". BATERAGUNE

Por otro lado, ha defendido la iniciativa de los socialistas guipuzcoanos relativa al 'caso Bateragune' porque "la justicia es la aplicación de la ley", pero "no sólo la que quiere la gente de Batasuna, ni la que quiere el PP". "La ley es todo, tanto el Código Penal como los principios que puede aplicar un juez, el principio de la realidad social", ha insistido.

En este sentido, ha subrayado que "la realidad social no es la misma" que cuando detuvieron a Arnaldo Otegi, Rafa Díez Usabiaga y el resto de encausados en Bateragune, como "dice todo el mundo hasta el señor Basagoiti", y este principio "se puede aplicar".

Tras reiterar que "la legalidad no se hace a la carta", sino que "es una tanto para Batasuna como para el PP", ha señalado que "el democráta acepta todo" y ha rechazado las críticas a la iniciativa socialista realizadas por la presidenta del Parlamento vasco, Arantza Quiroga, replicando que la pacificación "no es un tema electoralista" porque en ella "nos va la vida a muchas personas y el futuro de este país".

En este sentido, ha señalado que el PSE "es demócrata desde el principio, no desde hace 30 años", y considera la ley "íntegramente y no en lo que interesa para un momento político concreto".

Además, ha destacado que en el PP existe una "doble personalidad", en la que conviven la postura "más ortodoxa" de Quiroga con la "totalmente diferente" de Antonio Basagoiti. "Tenemos la actitud más posibilista de cara a la ciudadanía vasca y la actitud más dura de cara a ganar votos en España", ha censurado.

Situación "mucho mejor"

La juntera socialista ha considerado que "estamos en una situación mucho mejor que hace un año" porque, en esta ocasión, ETA ha dado "otro tipo de pasos que no se habían dado anteriormente como el fin de la extorsión", ha dicho.

Además, ha destacado "el éxito de los partidos vascos que son demócratas" para "llevar a ETA a esta situación y a la izquierda abertzale a apostar por únicamente y exclusivamente vías políticas y democráticas", que "nos sitúa en una responsabilidad histórica, más a la izquierda abertzale que llega 30 años tarde, pero también a todos los demás".

Por ello, ha esperado que "la actitud posibilista de algunos y la actitud pacifista de otros se concrete" porque "son los dos extremos los que no han permitido que nos sentemos todos".

Preguntada por la posible verificación del alto el fuego de ETA, ha señalado que, "más que verificación del alto el fuego, el Partido Socialista, el PP, la sociedad vascas sí pueden participar del análisis del estado actual de la cuestión". "Vamos a valorar qué pasos se han dado y por qué no son suficientes", ha propuesto Romero, pidiendo a "los extremos dejen de situarnos a todos los demás en una situación de parálisis total" porque "esto no da más".

En relación a los presos de ETA, ha opinado que "juegan y han jugado un papel muy importante" dentro del "mundo de ETA". "¿Qué papel puede jugar en el futuro, cuando ETA ya no esté? Creo que va a ser importante, pero eso no lo debe hacer una parte sólo de la política vasca. Lo debe hacer toda la política vasca a través de los órganos que legítimamente nos representan", ha añadido.

En esta línea, Rafaela Romero ha subrayado que "la solución tiene que ser común" porque "la paz o es compartida o no va a ser paz verdadera".

A su entender, los firmantes del Acuerdo de Gernika, "extasiados por la victoria electoral, no se están dando cuenta que solos no pueden".