El diputado autonómico de Foro Asturias por Avilés, Manuel Peña, ha mostrado este lunes su "desconcierto" por las reacciones de algunos patronos de la Fundación Niemeyer: "Parece que hay patronos de la Fundación a los que no les gusta que se controle lo que se ha hecho con el dinero aportado por todos los asturianos".

Manuel Peña ha recordado que "como es sabido, cualquier entidad pública o privada que resulte beneficiaria de fondos subvencionales públicos está obligada a justificar su adecuado empleo y utilización. En este contexto, impuesto por la Ley General de Subvenciones, la Fundación Niemeyer no es una excepción".

Del mismo modo, el diputado ha asegurado, en un comunicado, que "todos los perceptores de subvenciones públicas están, por Ley, obligados a justificar su uso y la debida aplicación de estos importes al fin de interés general que sirve de causa a su otorgamiento. El control compete, entre otros, al mismo gobierno que concedió la subvención, en nuestro caso, al Gobierno del Principado de Asturias por conducto de la Intervención General".

"En este contexto -confirma- desde la toma de posesión del nuevo gobierno, se han iniciado decenas de procedimientos de auditoría con el fin de conocer y estudiar cuál es el estado de las cuentas regionales. Entre ellos, se ejecutó un procedimiento que tenía por objeto verificar el uso que la citada fundación venía dando a las subvenciones concedidas desde la Consejería de Cultura".

A la vista del informe provisional elaborado por la Intervención General, Manuel Peña considera que "se deducen múltiples incidencias en la gestión de las subvenciones otorgadas desde el ejercicio 2007. No existen soportes documentales adecuados para justificar muchos de los gastos efectuados por la dirección de la fundación a los fines para los que el dinero de los asturianos les fue confiado".

El diputado de Foro Asturias ha puntualizado que es precisamente "la gravedad de las incidencias observadas por la Intervención, que alcanzan cientos de miles de euros, lo que motivó que, recientemente, el Presidente de la Fundación fuese citado en la Consejería de Hacienda y Sector Público. Pese a la explicación detallada efectuada en esta Consejería, Manolo Díaz ha pretendido desconocer el alcance de cuanto se le explicaba", lamenta.

"Resulta preocupante que, además, algunos de los patronos y amigos de esa Fundación se enfunden, por motivos exclusivamente políticos, dentro de la bandera de Avilés. El objeto del control no es Avilés ni los avilesinos; tampoco lo es la Fundación ni su actividad. El objeto del control ha sido, simplemente, el uso dado al dinero de todos los asturianos por parte de la dirección de la fundación. Si los responsables de la aplicación de fondos públicos no lo justifican debidamente, están sujetos a la obligación de reintegrar las cantidades entregadas", ha señalado.

"Esta obligación de justificar y, en su caso, reintegrar, es común a cualquier perceptor de subvenciones públicas. Tratar de esquivar esta responsabilidad mediante un pretendido ataque a los ciudadanos de Avilés es un argumento patriotero indigno de hacerse eco entre los ciudadanos de Asturias del Siglo XXI", añade Manuel Peña.

Finalmente, el diputado de Foro recuerda que "los responsables de la Fundación Niemeyer disponen desde la notificación del informe provisional de auditoría, de 15 días hábiles para alegar frente a las conclusiones que en él se soportan. Sus esfuerzos deben encaminarse a este fin y no a confundir a la opinión pública y a los avilesinos con un pretendido ataque que les dirige el Gobierno regional. Los avilesinos no son responsables del uso y justificación que la dirección del Niemeyer ha dado a las subvenciones pagadas con la hacienda de los asturianos".