Caamaño afirma que la izquierda "cayó en trampas" de la política liberal e insta a "buscar nuevas recetas"

Critica que en los últimos años Europa "se volcase" en reivindicar derechos y no se preocupase por exigir "cumplimientos y obligaciones"
La Paula Pena, Francisco Caamaño Y Pablo García
La Paula Pena, Francisco Caamaño Y Pablo García
EUROPA PRESS
La Paula Pena, Francisco Caamaño Y Pablo García

El presidente del Partido Socialista de A Coruña y ministro de Justicia, Francisco Caamaño, ha afirmado que la izquierda "cayó en trampas" de argumentos de la política liberal y "abandonó elementos" de parte de su "pensamiento" que se deben "recuperar y volver a poner en valor" mediante la búsqueda de "nuevas recetas".

Así lo ha expresado el dirigente socialista en la clausura de la escuela de verano del PSdeG 'La respuesta socialdemócrata a la crisis económica mundial' que se ha celebrado en Silleda (Pontevedra) y en la que se encontraban, entre otros dirigentes, el portavoz parlamentario del PSdeG, Abel Losada, el secretario de Organización de los socialistas gallegos, Pablo García, o la secretaria de Estado de Igualdad, Laura Seara.

En este escenario, Francisco Caamaño ha reflexionado sobre la situación de la izquierda europea, así como de la actual situación económica, que, a su juicio, "puso en relevo todas las debilidades de Europa", especialmente ahora que "con el sistema euro" los Estados adquieren "unos compromisos ajenos a sus capacidades".

"El gran problema de la socialdemocracia durante los últimos años es que en toda Europa nos fuimos volcando en reivindicar derechos, pero no nos preocupamos tanto de exigir cumplimientos y obligaciones en los espacios públicos", ha asegurado el dirigente socialista.

Además, ha criticado que en estos momentos existe "una sociedad consentida" que durante "mucho tiempo miró para si misma", por lo que, según ha apuntado, solo aquellos "que fueron capaces de apreciar" esa cuestión y "exigir autorresponsabilidad" desde "un primer momento" con "políticas fiscales de más solidarias y más eficientes" están ahora "mejor armados para afrontar esta situación".

En esta tesitura, en la que los estados tienen que "deber menos", Caamaño ha situado el reto en "hacer algunas renuncias" y "empezar a cambiar" la escala de valores y el "concepto del ciudadano consumidor".

"europa más austera"

"Hay dos formas de decirle a Europa que tiene que ser mucho más austera. Una, con las políticas liberales que muestran su desprecio absoluto a los espacios públicos, o bien defender la gestión pública y explicarle a los ciudadanos que una sociedad de individuos egoístas no tiene espacios de convivencia, para la igualdad", ha señalado Caamaño.

Precisamente, sobre esta cuestión, ha señalado que los socialistas se "enfrentan al gran reto" de "recuperar" elementos que formaban parte de su pensamientos, "buscar nuevas recetas" y explicarlas de cara a las próximas elecciones generales que tendrán lugar el próximo día 20 de noviembre.

"Tenemos que explicar porque los socialistas tenemos una concienciación mucho más clara, que la derecha española y gallega, para gestionar la austeridad y hacerlo pensando en todos", ha reivindicado Caamaño antes de indicar que el gobierno del Partido Popular "supondrá la privatización de todos los espacios públicos".

En este sentido, el dirigente socialista a augurado que "probablemente hay que hacer una política fiscal más agresiva" para garantizar la sostenibilidad de sistemas públicos como el educativo o el sanitario.

Un aspecto ante el cual ha insistido en que se debe "tener una ética firme de control del gasto y estar a la cabeza en la exigencia de derechos, pero también de obligaciones", acciones que ve como "la única forma" de "recuperar parte de la credibilidad que la izquierda europea tiene perdida".

"buscar amigos,

No votos"

Finalmente, en su intervención, Caamaño también se ha referido a la organización del Partido Socialista de Galicia al asegurar que, de cara a las elecciones generales se debe "empezar a buscar amigos", a ver las "necesidades" que tiene la gente, "no para pedirle el voto, sino como organización solidaria, que informa de lo que puede uno o tiene que hacer". Una vez conseguidos los amigos, ha señalado, "entonces habrá que pedir los votos".

"Hay que estar con la gente, comprometerse con ella y conocer la realidad de un país que tiene 2.700.000 habitantes entre los que, estoy convencido, hay algún socialista que tiene algo que decir y buena prácticas aportar, pues las soluciones no nos van a llegar desde Santiago ni desde Ferraz", ha zanjado.

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