El ministro de Fomento y portavoz del Gobierno, José Blanco, ha declarado que hubiera deseado "compartir con los ciudadanos" la decisión de la modificación constitucional pactada por PP y PSOE pero que "estamos en una situación grave que necesita respuestas rápidas", por lo que no se optó por la consulta popular, según ha expresado en una entrevista en la Cadena ser.

"Esta medida, si no se toma deprisa, pierde su valor y su eficacia" explicaba el ministro refiriéndose a los temores a una nueva recesión de la economía: "hace dos meses estábamos pensando en la recuperación y ahora en la recesión. Estamos en un contexto con una gran volatilidad".

Blanco ha señalado que la urgencia impide transferir la responsabilidad a los ciudadanos, por lo que el Gobierno asumirá la decisión y serán ellos quienes la juzgarán.

José Blanco entiende esta reforma como necesaria porque "la deuda excesiva es un lastre para un país". Aunque ha rechazado otras posibles propuestas para el control de las arcas públicas como "el déficit cero " que propuso el coordinador de economía del PP,  Critóbal Montoro, y que según el ministro "no es la estabilidad presupuestaria".

Ha criticado además a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, por "aprovechar el endeudamiento para empezar a recortar en educación, que es lo más sagrado", lo cual contrasta con lo que ha hecho el Gobierno, que es aumentar el número de becas.

Saliendo al paso de las críticas que ha recibido el Gobierno, por limitar el déficit en la Constitución,  Blanco ha defendido que "el principio de estabilidad presupuestaria es un principio socialdemócrata" y "flexible".

Blanco ha afirmado que no cree que la reforma constitucional tenga un coste político y se ha mostrado convencido de que no tendrá un coste social, sino al revés porque "una garantía de buen gobierno es una garantía del Estado del bienestar".

En respuesta a si el Gobierno subirá los impuestos a las rentas más altas, como ya ha hecho este jueves Portugal, el ministro de Fomento ha asegurado que "no hay tiempo" para crear o aumentar un impuesto que grave a los más ricos, pero que estará incluido en el programa electoral del PSOE para las próximas elecciones.

Respecto a una posible modificación del impuesto sobre el patrimonio, José Blanco se ha mostrado dubitativo y ha dejado abierta la posibilidad de llevar a cabo un cambio en este tributo.