El tráfico está este miércoles totalmente restablecido en la plaza de Cibeles de Madrid y su entorno, donde numerosos operarios retiran las últimas partes de los escenarios y gradas montados para la JMJ, tras trece días de cortes parciales o totales en el céntrico eje Prado-Recoletos.

Durante la mañana de este miércoles numerosos operarios han acabado de desmontar el gran escenario en el que se oficiaron dos de las principales misas de la Jornada Mundial de la Juventud, ubicado delante del Palacio de Cibeles -sede del Ayuntamiento de la capital-, del que sólo queda una pequeña parte de su estructura.

También han afanado en terminar de retirar una de las gradas montadas frente a ese escenario, en la equina con la calle Alcalá. Estos trabajos no obstaculizan el tráfico en el eje Prado-Recoletos, que empezó a sufrir cortes parciales el pasado día 11, cuando comenzaron los trabajos de montaje de las estructuras previstas para la JMJ.

Ese día se comenzó a cortar el tráfico parcialmente por las noches en la plaza de Cibeles y en varias vías adyacentes, obligando a reducir carriles y a desplazar algunas paradas e itinerarios de autobuses.

Responsables del desmontaje de estas estructuras han explicado que el escenario central, que ha estado ubicado frente a la fachada principal del Palacio de Correos y Telecomunicaciones, sede del Ayuntamiento de Madrid, será lo último que se desmonte y que, como máximo, el domingo ya habrá desaparecido.

El día 13 de agosto comenzaron los cortes parciales en los ejes Prado-Recoletos -entre Colón y Atocha- y Gran Vía-Alcalá -entre plaza de España y Cibeles-, por lo que el Ayuntamiento recomendó utilizar el transporte público a partir de ese momento y durante toda la JMJ, celebrada entre los días 16 y 21.

El día 20 el Ayuntamiento reabrió al tráfico los dos ejes citados, aunque algún carril siguió cortado al tráfico, pero el día 22 la circulación se volvió a ver afectada por la misa que el movimiento eclesiástico Camino Neocatecumenal celebró en Cibeles.