Mientras la Comunidad ha trasladado los actos a otras zonas de la región, el Ayuntamiento de la capital no ha dado permiso para desarrollar las actividades organizadas por el Movimiento Vecinal Maravillas-Malasaña.Su vicepresidente, Manuel Gambarte, aseguró ayer que protestarán por este abandono, que ya dura tres años, en una concentración lúdico-reivindicativa que harán en la plaza del Dos de Mayo a las 12.00 del martes y bajo el lema

Además, los vecinos aseguran que nadie les impedirá llevar a cabo sus concursos infantiles de dibujo, pintura, fotografía y baile, un homenaje a la tercera edad e incluso disfrutar de un concierto del grupo de rock Las Malas Lenguas.

Botellón de cuarentones

Pero la censura festiva no ha acabado con el botellón. Según Gambarte, "los chinos venden aquí cervezas en todas las esquinas".

"A las cuatro de la mañana empieza un botellón especial de gente mayor y con poder adquisitivo, a la que echan de los bares que cierran en el centro. Eso no lo prohíben, sólo nuestras fiestas".

¿Qué opinan los vecinos y comerciantes?

"No entiendo por qué no hay fiestas, ya que beneficiarían mucho a los comercios que están alrededor".

"¿Por qué en otros barrios no las prohíben y aquí sí? Yo he llegado hace un año a trabajar a Malasaña y no he vivido ninguna fiesta".

"Me parece ridículo. Entonces, ¿qué vamos a hacer, suspender las fiestas populares?"

"No podemos tener a la gente con las manos atadas. Es tan ridículo como si decidiesen quitar las fiestas de La Paloma".

"Me parece fatal que no haya fiestas, porque estaban muy arraigadas".

"El Ayuntamiento de Madrid no es nadie para dejar a un barrio sin fiestas. Hace dos años las prohibieron y el pasado teníamos  conciertos programados, pero los anularon".