Los participantes en la Tomatina de Buñol (Valencia) de este año se lanzarán 120.000 kilogramos de tomate procedentes, como en otras ediciones, de la cooperativa agrícola de Xilxes (Castellón), según ha informado a Europa Press el concejal de Comunicación de esta localidad, Rafael Pérez. Este acto tendrá lugar, como marca la tradición el último miércoles de agosto, en esta ocasión el día 31.

El edil ha indicado que se prevé que tomen parte de esta celebración entre 35.000 y 40.000 personas de "procedencia muy diversa", tanto de la Comunitat Valencia, como de otras zonas de España y de otros países, especialmente, de Japón, Australia e India, donde la Tomatina está despertando gran expectación. Ha recordado que esta festividad ha sido en 2011 la protagonista de una película de Boollywood y que para su rodaje se organizó en Buñol el pasado mes de febrero una Tomatina extra.

Respecto al número de participantes, Pérez ha destacado que el pasado año se alcanzó una "cifra récord" con la asistencia de 44.000 personas y ha comentado que este año se estima que ésta sea menor y que se mueva entre los 35.000 y 40.000 asistentes habituales teniendo en cuenta que la Tomatina tendrá lugar el último día de agosto, coincidiendo con el final de muchas vacaciones.

Este festejo tiene sus orígenes en 1945, en la pelea que un grupo de jóvenes inició lanzándose tomates. A partir de entonces, cada año se fue repitiendo esta escena hasta dar lugar a la conocida festividad.

Este acto empezará, como es habitual a las 11.00 horas y concluirá al mediodía, una hora después. Tanto el inicio como el final se anunciarán con una carcasa. Pérez ha señalado respecto a la hora de comienzo de esta celebración que lo tradicional es que arranque cuando concluye la cucaña (un palo enjabonado con un jamón en su extremo) que se instala ese día, después de que quienes participan en ella logran alcanzar el trofeo que se coloca en su parte más alta, aunque ha apuntado que el inicio se ha fijado a las 11.00 horas.

La Tomatina tendrá lugar en la zona habitual, entre las calles San Luis y la Avenida Diputación de Buñol. Se trata de un itinerario que recorrerán los cinco camiones con bañera de gran tonelaje que transportan el tomate. El concejal de Comunicación ha explicado que sobre estos vehículos viajarán aproximadamente 150 personas (unas 30 por camión) que se encargarán de repartir esta hortaliza entre los asistentes.

Asimismo, ha manifestado que para garantizar la seguridad del acto se contará con un operativo especial del que formarán parte un centenar de policías locales, tanto de Buñol como de otras poblaciones que acuden como refuerzo; 150 miembros de Protección Civil; entre 30 ó 40 agentes de la Guardia Civil; dos helicópteros de la Policía Nacional y unos 50 vigilantes de seguridad privada contratados por el Ayuntamiento de Buñol para controlar el recorrido y vigilar que los participantes guardan la distancia adecuada a los camiones.

Por otro lado, se habilitarán en cuatro o cinco zonas del municipio espacios para instalar duchas en los asistentes a la Tomatina puedan lavarse cuando concluya, según ha precisado el edil. Ha agregado que para ello se contará también con las mangueras que el Ayuntamiento y los vecinos de la ciudad ofrecen a los participantes. Además, Pérez ha recordado que muchos de ellos acuden al río Buñol para refrescarse tras el festejo.

Llegar con tiempo

El consistorio preparará, asimismo, distintas zonas del término municipal para que puedan ser utilizadas como aparcamiento, tanto de coches como de autobuses. Rafael Pérez ha agregado para facilitar la movilidad el día de la Tomatina se cierra al tráfico el casco urbano de Buñol y que sólo se permite circular por determinadas zonas.

El concejal ha pedido a los asistentes a esta celebración que lleguen con tiempo, sobre las 8.00 u 8.30 horas, y que no lo hagan a última hora porque "a partir de las 9.00 horas el acceso será difícil" al recinto en el que tiene lugar el disparo de tomates.

Por otro lado, Rafael Pérez ha apuntado que el Ayuntamiento de Buñol tiene previsto estudiar para el próximo año, aunque resulta "complicado", reducir el aforo para participar en la Tomatina. Ha explicado que lo que se hace ahora es vigilar la entrada de público y cortar los accesos al recorrido cuando se estima que ya hay suficiente gente.