El brazo armado del movimiento islamista Hamás se ha desvinculado del acuerdo de tregua alcanzado entre Israel y el gobierno de Gaza tras la operación Plomo Fundido, a raíz de los últimos bombardeos contra esta franja y la muerte de catorce palestinos.

"No hay más tregua con el enemigo", informaron la madrugada del viernes al sábado los Batallones Azedin Al Qasam en un breve comunicado difundido por una emisora del movimiento.

El mensaje justifica la decisión en la continuación de las "masacres israelíes injustificadas contra el pueblo palestino", alusión a la última ola de bombardeos aéreos en Gaza tras los atentados del jueves en los que murieron ocho israelíes.

En las últimas horas los bombardeos han continuado y causado la muerte a otros tres palestinos, informó la agencia Wafa, por lo que el número de muertos en Gaza ascendió a catorce.

También prosiguieron los lanzamiento de cohetes y proyectiles de mortero contra el sur de Israel por los grupos armados palestinos, también en la mañana de este sábado en la ciudad de Ashdod, en los que hirieron a tres obreros palestinos que se hallaban en la ciudad de forma ilegal.

El anuncio del grupo armado contrasta con otras informaciones acerca de que el primer ministro de Hamás en Gaza, Ismail Haniye, ha contactado con representantes de la ONU, la Liga Árabe y Egipto para tratar de relajar la tensión en la zona.

En la ola de violencia que comenzó el jueves han muerto también cuatro soldados egipcios, lo que ha provocado que Egipto saque a su embajador de Israel.

El ministro israelí de Defensa, Ehud Barak, lamentó la muerte de "policías egipcios" en un suceso fronterizo ocurrido el jueves tras los atentados de Eilat, pero no reconoció por el momento la responsabilidad de Israel.