Los peregrinos de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) han invadido Madrid. No hace falta más que salir a la calle o coger el transporte público para toparse con decenas de grupos de jóvenes cristianos que esperan emocionados la llegada del papa. Sus sombreros, sus camisetas y, sobre todo, sus mochilas se han convertido estos días en una imagen cotidiana en la capital española.

Todos los peregrinos inscritos en la JMJ han recibido una de esas mochilas. Pero, ¿qué esconden en su interior? Aparte de la citada mochila roja y amarilla decorada con el logotipo oficial del evento, los peregrinos cuentan con una camiseta y un gorro australiano a juego. Para combatir el calor, además del sombrero, hay un abanico

En cuanto a documentación, lo principal es el pase de peregrino, que permite el acceso a las más de 300 actividades programadas para estos días, recogidas todas en una agenda cultural y litúrgica que indica el lugar y horario de cada acto. Para desplazarse sin problemas por la ciudad, la mochila también incluye una buena cantidad de ayudas: un abono de transportes JMJ, un plano de la red de Metro y otro de la ciudad de Madrid. Para mayor seguridad se ha añadido incluso un seguro de accidentes.

En función del tipo de inscripción que se haya realizado, la mochila también puede llevar vales de comida que pueden canjearse por el menú JMJ.

Son muchos más los "papeles" que pueden encontrarse en la mochila. En concreto, hay un libro de ceremonias, el Evangelio según San Mateo en seis idiomas, el Youcat (un libro que recoge la doctrina adaptada al lenguaje de los jóvenes) y el cómic Habemus Papam! Otros regalos aún más originales son una cerveza sin alcohol, un CD con el himno oficial de la JMJ, un rosario y un crucifijo que va introducido en una caja similar a la de un medicamento acompañado de un original prospecto.