El senador del BNG, Xosé Manuel Pérez Bouza, ha reclamado al delegado de la Xunta en Ourense, Rogelio Martínez, una "mínima coordinación" entre los diferentes departamentos de la Administración gallega, junto con el resto de implicadas en "la solución", para evitar problemas por la "intensa contaminación" del embalse de As Conchas.

Esta demanda surge en referencia a que, mientras que la página web de la Consellería de Sanidade advierte de que dos de las playas del embalse no son aptas para el baño, la Dirección Xeral de Xuventude permite que los participantes en campamentos de verano se bañen en ellas "poniendo en riesgo su salud".

En concreto, según un comunicado del BNG, la Consellería de Sanidade indica en su página web que las playas ourensanas de Corgo (Muíños) y Porto Quintela (Bande) son los dos únicos arenales no aptos para el baño en Galicia. A este respecto, el senador nacionalista ve "sorprendente" que en los tres meses y medio que han transcurrido desde que comenzase este "episodio de contaminación" no se hayan convocado reuniones para coordinar el trabajo de las administraciones".

La formación nacionalista ha apelado también a la responsabilidad de las corporaciones municipales en este asunto, que "deberían garantizar que los visitantes del embalse estén informados de que las aguas no son aptas para el baño". En este sentido, han añadido que "si no tienen medios para mantener unos carteles informativos, tienen la obligación de reclamar ayuda de la Xunta".

Por otra parte, Pérez Bouza ha respondido al presidente de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil, Francisco Liñares —que ayer restó importancia a la situación del embalse—, que "si se reconoce incompetente para solucionar el problema de contaminación, lo mejor que puede hacer es irse a casa". El senador nacionalista ha manifestado que un problema como éste "no se puede despachar diciendo que ya lo solucionarán las lluvias del otoño".