Nueva batalla campal entre turistas y policías en Lloret

Carga policial en Lloret de Mar.
Carga policial en Lloret de Mar.
ACN
Carga policial en Lloret de Mar.

Lloret de Mar (Girona) ha vivido este jueves una nueva noche de altercados entre jóvenes turistas y la Policía, con centenares de vándalos enfrentándose a los agentes a las puertas de una discoteca.

Según han informado fuentes de los Mossos d'Esquadra, todo ha empezado cuando la Policía catalana han impedido entrar a más clientes en una de las discotecas de moda, en la avenida Just Marlés, porque no funcionaba el aire acondicionado, y han hecho después un pasillo para permitir salir a la gente.

Entonces varios centenares de turistas que querían entrar en el local la han emprendido contra los Mossos y han acabado enfrentándose con ellos, sobre las dos de la madrugada. Además, en la zona de ocio se han quemado varios contenedores.

En total, han sido detenidas una veintena de personas por protagonizar desórdenes. Se trata de trece turistas franceses, tres alemanes, dos holandeses, un suizo y un esloveno, en su mayoría de edades comprendidas entre los 20 y los 22 años, a excepción de un menor (de 16 ó 17 años) y un adulto (de entre 30 y 31 años).

Debido a la trifulca, el Sistema de Emergencias Médicas (SEM) tuvo que atender a 22 personas, todas ellas de carácter leve, de las que nueve eran agentes de los Mossos d'Esquadra, que fueron dados de alta 'in situ'. De los otros trece heridos, siete fueron traslados al Hospital de Blanes (Girona), afectados principalmente por contusiones y por intoxicaciones etílicas, según el SEM.

A las puertas de una discoteca

Los incidentes han empezado en la puerta de la discoteca Colossos, en la avenida Just Marlés, donde tras tener una avería eléctrica, han usado generadores que no tenían suficiente potencia para el aire acondicionado, han informado los Mossos.

Tras varias lipotimias, la Policía catalana ha optado por impedir que entrara más público y eso ha congregado a muchos jóvenes en la puerta, y cuando la Policía ha querido hacer un pasillo para que la gente pudiera salir del local, ha empezado el enfrentamiento.

En el lugar estaban decenas de agentes de la Brigada Móvil (Brimo) y el Área de Recursos Operativos (Arro) de los Mossos, además de los de seguridad ciudadana y la Policía Local. El lunes ya se registraron incidentes entre más de 400 jóvenes turistas franceses e italianos que se enfrentaron a la policía al cierre de las discotecas, que se saldó con un detenido francés de 23 años.

Ante estos hechos, el conseller de Interior, Felip Puig, decidió reforzar la presencia policial en Lloret y anunció que los Mossos d'Esquadra serán "cada vez más contundentes" al actuar contra los turistas que vienen a Cataluña a "hacer lo que no se atreven a hacer en su casa".

Un alcalde "indignado"

El alcalde de Lloret, Romà Codina (CiU), ha asegurado estar "indignado" con los altercados y ha afirmado que las cosas tienen que cambiar. Codina ha comparecido este jueves ante los medios acompañado de todos los concejales del consistorio y ha leído un comunicado, sin admitir preguntas, en el que decía que no solamente se hacía una declaración de intenciones sino que "se marcaba un punto de inflexión en la política turística de Lloret de Mar".

"Estamos indignados y muy molestos, ya basta, la situación no puede continuar así y a partir de hoy las cosas cambiarán", ha declarado el alcalde.

En primer lugar se harán inspecciones de control para evitar la venta de alcohol a menores de 18 años, también se controlará el acceso de estos menores en los locales, se vigilarán los aforos en las discotecas y bares, además de si cumplen la legalidad ambiental: "Si no lo hacen serán cerrados", han asegurado.

En la ordenanza de vía pública se añadirán dos apartados: el control de la venta ambulante y el de la prostitución en las calles del municipio. En relación a la salud y la seguridad ciudadana, el ayuntamiento pedirá que en los momentos de máxima afluencia de visitantes se garantice una coordinación entre los Mossos d'Esquadra y la Policía Local y que además se destinen más recursos policiales a la localidad.

Finalmente se ha anunciado que se creará una ordenanza de comportamiento cívico, en septiembre, para que queden reguladas todas las actuaciones incívicas, además de los disco-tours. El ayuntamiento ha reiterado que se está estudiando la posibilidad de pedir que se avance el horario de cierre de las discotecas.

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